Mis músculos están magullados al apretarlos, por favor dígame cómo reducir la hinchazón.
2. Fase Dos - Actividades Limitadas: Una vez completados los primeros auxilios y los procedimientos de detumescencia, la atención debe centrarse en la curación de la zona afectada. Lo primero que hay que hacer es entender el papel de la sangre en la recuperación de la zona afectada. Los glóbulos blancos de la sangre pueden defenderse de los gérmenes, eliminar el tejido necrótico y mejorar la inmunidad del cuerpo. Por lo tanto, el tiempo de recuperación del área afectada es directamente proporcional al suministro de sangre. Por ejemplo, la piel y los músculos tienen tejido capilar denso, por lo que el período de recuperación es corto; mientras que los ligamentos y tendones tienen capilares escasos, que requieren al menos seis semanas para sanar en cuanto al cartílago que protege las articulaciones, porque no hay suministro de sangre; En definitiva, sólo la cirugía puede curarlo. Además de la densidad de los vasos sanguíneos, la cantidad de ejercicio también afecta el grado de circulación sanguínea. En la fase inicial de recuperación, la zona afectada no soporta el ejercicio intenso, por lo que es recomendable utilizar compresas calientes o masajes para favorecer la circulación sanguínea. Pero cuando el tejido lesionado está sano y el área afectada ya no siente hormigueo, se puede pasar a la segunda etapa, que consiste en promover la circulación sanguínea mediante ejercicio moderado. La llamada moderación significa que la parte afectada puede realizar actividades dentro del rango autónomo (sin presión) y normal sin sentir ninguna molestia.
3. La tercera etapa: presión gradual: cuando la parte afectada se mueve dentro de su propio rango sin sentir dolor, se puede aplicar presión al tejido lesionado para fortalecerlo. Sin embargo, la intensidad de la presión debe ser moderada y debes detenerte una vez que sientas dolor, de lo contrario provocará lesiones secundarias. En segundo lugar, al realizar un entrenamiento de compresión en la zona afectada, tenga cuidado de evitar las compresas calientes dentro de las 12 horas posteriores al entrenamiento. Además, esta etapa también se puede aprovechar para corregir el desarrollo desequilibrado de los grupos musculares y fortalecer las zonas débiles mediante compresión.
4. La cuarta etapa: curación de la parte afectada: Con la finalización de la tercera etapa, la parte afectada volverá a 2/3 de su fuerza muscular original. En este momento, puede recurrir a. escalada real para ayudar a sanar. Debido a que el área afectada no se ha utilizado durante mucho tiempo, será necesario un período de reajuste antes de que pueda trabajar en coordinación con otros grupos de músculos. Puedes comenzar con un entrenamiento de escalada difícil y de baja intensidad para permitir que la zona afectada se adapte a diversas posturas y movimientos, y luego la intensidad aumentará gradualmente. En comparación con la tercera etapa, esta etapa puede ayudar a los atletas a examinar sus habilidades de escalada. Si normalmente tiendes a escalar o escalar terrenos específicos con movimientos fijos, entonces realizar un entrenamiento de escalada diversificado en esta etapa reducirá la posibilidad de que vuelvan a ocurrir lesiones similares.
En primer lugar hay que distinguir la gravedad de la lesión. En términos generales, si está ejercitando el tobillo, aunque le duele, no es grave. Es principalmente una lesión de los tejidos blandos que puede tratar usted mismo. Si hay un dolor intenso al mover el tobillo, no puede pararse ni moverse, el dolor está en los huesos, hay un sonido cuando se torce y hay una rápida hinchazón después de la lesión. Es un signo de fractura y debe ir al hospital para recibir tratamiento de inmediato.
En segundo lugar, utilizar correctamente las compresas frías y calientes. Las compresas calientes y las compresas frías son terapias físicas, pero tienen efectos completamente diferentes. La sangre caliente se activa y la sangre fría se coagula, por lo que se recomiendan compresas frías en la etapa inicial de la lesión para reducir el hematoma local; las compresas calientes después de la hemostasia pueden acelerar la disipación de la estasis sanguínea alrededor de la herida; Por lo general, las compresas térmicas no se deben utilizar hasta pasadas 24 horas de la lesión.
En tercer lugar, la medicación. Actualmente, las farmacias disponen de muchos medicamentos para los hematomas, como el aceite de cártamo, el aerosol Yunnan Baiyao, etc.
Cuarto, masaje local. Antes de aplicar el medicamento, primero masajee el pie lesionado y frote suavemente el área lesionada con dos pulgares. La dirección del frotamiento es desde el pie hasta la pantorrilla, lo que puede aliviar el dolor y reducir la hinchazón.