¿Por qué mi hijo tiene dolor de oído?

5 El dolor de oído en los niños causado por resfriados también puede ser causado por infecciones comunes. Esto se debe a que los resfriados a veces pueden provocar que la trompa de Eustaquio se bloquee, lo que provoca un desequilibrio en la presión del aire entre el oído interno y el oído externo. La presión en el tímpano aumenta, irritando el tímpano y provocando dolor.

Recordatorio: los niños deben mantenerse abrigados después de resfriarse. Bajo la supervisión de un médico, utilice racionalmente los medicamentos para el resfriado. Una vez curado el resfriado, el dolor de oído desaparecerá.

6 El dolor de oído en los niños causado por forúnculos también puede ser causado por forúnculos. Si la otitis externa no se trata a tiempo, o la piel del canal auditivo se sumerge en agua durante mucho tiempo, la resistencia de la superficie de la piel se debilita, lo que puede provocar fácilmente forúnculos e hinchazón del canal auditivo. Si el dolor de oído es intenso, al masticar, Tirar de la aurícula o presionar el trago agravará el dolor de oído.

Recordatorio: los padres pueden observar cuidadosamente los oídos externos y los canales auditivos de sus hijos. Si encuentra un forúnculo, es mejor consultar a un médico para recibir tratamiento, ya que retrasar la afección puede afectar su audición.

7 Tumores del oído Si un niño tiene un tumor maligno en el canal auditivo o en la cavidad del oído medio, a medida que la afección progresa, el tumor se infiltrará en el tejido circundante, además de provocar sangrado en el canal auditivo y pérdida de audición. También habrá distintos grados de dolor de oído.

Recordatorio: para los tumores de oído, es mejor consultar a un médico para un diagnóstico diferencial antes del tratamiento. Los padres no deben hacer conjeturas descabelladas.

8 Cosas a tener en cuenta: El dolor de oído en los niños suele manifestarse como rascarse las orejas y las mejillas, sacudir la cabeza, inquietud, llanto, pérdida de apetito, fiebre, etc. , incluso acompañado de secreción amarilla en los oídos y mala audición. Los padres deben llevar a sus hijos al hospital a tiempo para un examen de oído y recibir un tratamiento cuidadoso de acuerdo con las instrucciones del médico. No pueden tomar medicamentos antiinflamatorios por sí solos, lo que deja a sus hijos en riesgo de recibir un tratamiento incompleto.