¿Cuáles son los riesgos del trasplante de células madre?
El fracaso del trasplante es una de las complicaciones tempranas más graves del trasplante de células madre hematopoyéticas. Debido a que el injerto no logró implantarse exitosamente y la reconstrucción hematopoyética fracasó, las manifestaciones clínicas fueron una reducción severa de la imagen de la sangre total del paciente con reducción o hiperplasia del vacío de la médula ósea, complicaciones graves de infección y sangrado, dificultad en el tratamiento y alta mortalidad. Sin embargo, con el avance continuo de la tecnología de trasplantes, la incidencia de fracaso del trasplante se ha reducido a menos de 5, o incluso menos.
La enfermedad de injerto contra huésped (EICH) es una complicación importante y causa de muerte en el trasplante de células madre hematopoyéticas, y su aparición está relacionada con las diferencias inmunogenéticas entre el donante y el receptor. La EICH generalmente se divide en EICH aguda y EICH crónica. La EICH aguda afecta principalmente a la piel, los intestinos y el hígado, y sus manifestaciones clínicas son erupción cutánea, diarrea y daños en la función hepática. La EICH crónica es una enfermedad sistémica similar a las enfermedades autoinmunes, que a menudo afecta a múltiples órganos.
La cistitis hemorrágica es una de las complicaciones comunes del trasplante de células madre hematopoyéticas. Está causada por el daño a la mucosa de la vejiga por los fármacos de quimioterapia utilizados en el pretratamiento. Las manifestaciones clínicas son diversos grados de hematuria y la mayoría de los pacientes pueden recuperarse después del tratamiento con grandes cantidades de líquidos y orina alcalina. Actualmente, la incidencia y gravedad de la cistitis hemorrágica se han reducido a niveles más bajos debido al uso de medicamentos durante el trasplante.
Complicaciones a largo plazo: principalmente relacionadas con enfermedades respiratorias y pulmonares, hipotiroidismo, hipogonadismo, cataratas, segundos tumores secundarios, etc. Estas complicaciones son causadas principalmente por efectos secundarios como la radioterapia y la quimioterapia durante el proceso de trasplante, y la tasa de incidencia no es alta.