Mucha gente dice que los frijoles negros son los maestros de la salud. ¿Es esto cierto?
Su contenido es el mayor entre los alimentos vegetales, y la vitamina E es un buen antioxidante. Una suplementación adecuada de vitamina E puede desempeñar un papel hidratante y embellecedor. Sin embargo, el sésamo negro contiene un alto contenido de aceite y no debe consumirse en exceso. Puedes comer una cucharada de semillas de sésamo negro todos los días, que pueden complementar la nutrición y regular el organismo. Además, los fitoesteroles contenidos en los frijoles negros pueden competir con los esteroles de otros alimentos en la absorción, acelerando así la excreción de esteroles en las heces y previniendo la acumulación excesiva de colesterol en el cuerpo.
Las antocianinas rojas liberadas de la cubierta de la semilla de los frijoles negros pueden eliminar los radicales libres del cuerpo y tienen una buena actividad antioxidante en condiciones ácidas (secreción de ácido gástrico), mejorando así la vitalidad. Los ácidos grasos insaturados de los frijoles negros se pueden convertir en lecitina en el cuerpo humano, que es el componente principal de la formación de los nervios cerebrales. El calcio y el fósforo de los minerales contenidos en los frijoles negros pueden prevenir el envejecimiento y la lentitud del cerebro, fortalecer el cerebro y mejorar la inteligencia.
Las judías negras son ricas en proteínas de alta calidad, vitaminas y minerales, especialmente vitamina B, vitamina E, hierro, calcio y zinc. Además de los nutrientes, los frijoles negros también son ricos en sustancias bioactivas, como antocianinas, isoflavonas de soja, etc., que son fuertes antioxidantes y pueden eliminar los radicales libres. Los frijoles negros tienen las funciones de mejorar la inmunidad, retrasar el envejecimiento, embellecer la piel, aliviar los síntomas de la menopausia y nutrir la sangre y los riñones. Tiene los efectos de nutrir la sangre y mejorar la vista, fortalecer los huesos y el cerebro, retrasar el envejecimiento y fortalecer el bazo y el estómago. Sin embargo, contiene una gran cantidad de aceite y no se debe consumir en exceso. Una cucharada de semillas de sésamo negro al día es suficiente.