Los niños están activos
Muchos padres dicen que sus hijos son extremadamente traviesos e inquietos y no pueden ser controlados. ¿No saben qué hacer? De hecho, puede ser normal que los niños sean traviesos e irritables. Padres, no se preocupen demasiado. Se puede mejorar con orientación científica. ¿Cómo educar a los niños traviesos?
Primero, orientación científica. Si se trata de un fenómeno normal, entonces los padres deben mostrar la tolerancia adecuada, combinar la picardía y la actividad con pasatiempos, ampliar los horizontes de sus hijos y aprender más sobre el sentido común en la vida. Dales pleno respeto. Comprender sus necesidades internas y tolerar sus comportamientos. Cuando un niño se porta mal, lo primero que hay que hacer es averiguar por qué. Después de identificar las razones, brinde educación específica. Es decir, cuando los niños se portan traviesos no los dejes solos, sino cuídalos más. Los padres no deberían malcriarse. Debemos disciplinar y guiar estrictamente a los niños para que se den cuenta de que esto no está permitido. Para los niños con psicología rebelde, los padres deben comunicarse más con sus hijos u observar el comportamiento de sus hijos.
En segundo lugar, los padres deben ceñirse al resultado final. Para los niños que son particularmente difíciles de disciplinar, puede castigarlos no viendo televisión, no jugando, etc., y no amenazando o intimidando a los niños. Hay métodos educativos y objetivos educativos. Los padres deben prestar atención a los métodos y métodos a la hora de educar a sus hijos y dar el ejemplo. Detenlo a tiempo y córtalo de raíz. Si un niño simplemente muestra un comportamiento travieso, se le debe brindar orientación y educación de inmediato. También debes darles más recordatorios en momentos normales para que puedan desarrollar el hábito de la corrección consciente.
Finalmente, aprenda más sobre las fortalezas de su hijo y felicítelo y anímelo. En realidad, muchos niños comen cosas blandas en lugar de cosas duras, por lo que, en el caso de los niños, darles más elogios y estímulos y descubrir sus propias fortalezas puede ayudarlos a desarrollarse y crecer en una dirección más positiva. Cuando son elogiados, se alegran y les va mejor. Ofrezca a sus hijos suficientes oportunidades y tiempo para hacer ejercicio. Para permitir que un niño así se siente tranquilo, primero debes darle la oportunidad de hacer ejercicio para que pueda satisfacer sus necesidades de ejercicio físico. Llévalo a aprender algunos deportes o ve a un castillo travieso para que tenga suficiente tiempo para hacer ejercicio.