Tratamiento del impétigo en niños

1 Tome 1 g de cloranfenicol inyectable y 12 ml de violeta de genciana al 2%, mezcle bien y reserve. Primero lave el pus con agua ligeramente salada o agua tibia y luego limpie el área afectada con un hisopo de algodón humedecido en una solución de cloranfenicol y violeta de genciana, 3-4 veces al día, y el tratamiento dura 3 días. Si un curso de tratamiento no cura el problema, se puede utilizar otro curso de tratamiento.

Generalmente, se usa alcohol al 75% para limpiar el área de la piel afectada para desinfectarla, y luego se usa un hisopo de algodón o una aguja fina esterilizada para pinchar la cicatriz de pus para absorber el líquido. El líquido seguirá goteando, por lo que es necesario drenarlo varias veces y aplicar un líquido de violeta de genciana al 2% para evitar que el área afectada se expanda. Limpie la piel circundante con alcohol (antes de cada alimentación) para mantenerla limpia. Preste atención a cambiarse la ropa interior con frecuencia y haga un buen trabajo de limpieza y cuidado. Si hay pústulas, cámbiese la ropa interior todos los días. Si hay muchas pústulas, acudir al hospital para diagnóstico y tratamiento.

En caso de síntomas leves se requiere tratamiento externo general. En la etapa inicial de la enfermedad, solo hay unas pocas pústulas. Es aconsejable pinchar la epidermis, succionar el líquido con un algodón esterilizado y aplicar un líquido púrpura al 2% o ungüento de bacitracina de neomicina en la piel alrededor del área afectada; desinfectarse con alcohol al 75% cada 2-3 horas. El área de la costra debe enjuagarse con una solución de permanganato de potasio 1:1000, luego quitar la costra y aplicar un poco de líquido violeta. Mantenga a su hijo limpio, con ropa limpia y con la piel limpia y seca.

El empiema es la enfermedad cutánea más frecuente en niños causada por piógenos. Es causada principalmente por Staphylococcus aureus y puede inducir glomerulonefritis aguda. La aplicación de solución de cloranfenicol y violeta de genciana tiene un efecto curativo evidente.

5 Hay demasiadas pústulas. Se utilizan antibióticos (penicilina, eritromicina, gentamicina, etc.) y antihistamínicos por vía sistémica, y por vía tópica una solución de violeta de genciana al 2% o ungüento antibiótico. El cloranfenicol es un antibiótico de amplio espectro que es eficaz contra bacterias tanto Gram positivas como Gram negativas. La violeta de genciana tiene efectos bactericidas y astringentes. Mezclar los dos mejorará el efecto y proporcionará una mayor eficacia.

6 Niños enfermos, su ropa, pañales, etc. Deben hervirse y desinfectarse una vez al día, y la ropa de cama debe secarse al sol; las necesidades diarias de los bebés y niños pequeños deben desinfectarse, lavarse y secarse con frecuencia, y deben prepararse un juego para su propio uso; bañar, cambiar de ropa y cortar las uñas de los niños con frecuencia y prevenir daños en la piel;

7 Las pústulas neonatales deben aislarse y tratarse inmediatamente una vez descubiertas. A las personas con enfermedades leves se les puede administrar penicilina intramuscular o antibióticos orales. Las pústulas graves se encuentran principalmente en la piel de las extremidades, en la cabeza, el pecho y la espalda. Hay herpes del tamaño de un guisante que contiene un líquido ligeramente turbio. Cuando el herpes se expande hasta cierto punto, puede ulcerarse por sí solo, lo que se denomina pénfigo. Durante el tratamiento, además de aplicar el medicamento en el área afectada de la piel, se debe inyectar penicilina por vía intramuscular y se debe administrar suficiente nutrición e hidratación. Esta situación generalmente requiere tratamiento hospitalario y la recuperación clínica tarda entre 1 y 2 semanas. Si no se trata o se trata de forma inadecuada, se puede desarrollar sepsis neonatal, lo cual es peligroso.