Cómo conservar el polvo de hígado de cerdo
Según la ciencia popular, después de los 6 meses de edad, el hierro que aporta la leche materna se ha agotado y la anemia ferropénica es común. El hígado de cerdo es un buen alimento para reponer el hierro y la sangre, pero los bebés de seis meses aún no pueden masticar la comida, así que conviértalo en polvo y dáselo al bebé junto con cereal de arroz.
El polvo de hígado de cerdo es un alimento saludable elaborado a partir de hígado de cerdo seco como materia prima principal y molido hasta convertirlo en polvo. Por lo general, se puede combinar directamente con alimentos complementarios, como gachas, fideos, fideos de arroz, sopa, etc., que pueden absorber eficazmente los iones de hierro en el polvo de hígado de cerdo, promoviendo así la producción de hemoglobina y mejorando los síntomas de la anemia. Además, el contenido de vitamina C en el polvo de hígado de cerdo es muy alto, lo que tiene cierto efecto en el alivio de la fatiga visual y la mejora de la ceguera nocturna. La vitamina B en el polvo de hígado de cerdo tiene un cierto efecto neurotrófico y la vitamina C puede aumentar la elasticidad de los vasos sanguíneos y reducir la probabilidad de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. Complemente el hierro con regularidad, 2 o 3 veces por semana, de 5 a 10 g cada vez. Si tienes una deficiencia leve de hierro, ¡puedes comer menos de media cucharada al día!
Los beneficios de hacer hígado de cerdo en polvo son: es fácil de comer y almacenar, sabe mejor que el hígado de cerdo fresco, no tiene olor a pescado y puede agregar sabor a los alimentos complementarios. ¡Es adecuado para madres que no tienen tiempo para preparar alimentos complementarios o bebés que no comen hígado de cerdo fresco!
Hígado de cerdo en polvo
Preparación de ingredientes: hígado de cerdo fresco: una pieza; jengibre: varias rodajas;
Pasos específicos:
Primer paso: poner el hígado de cerdo fresco en la olla y remojarlo en agua para quitar la sangre.
Paso 2: Cortar en trozos pequeños y remojar en agua.
Paso 3: Pon una cantidad adecuada de agua en la olla. Después de que hierva, agrega el hígado de cerdo.
Paso 4: Quitar la espuma, coger el hígado de cerdo y lavarlo.
Paso 5: Añade una cantidad adecuada de agua a la olla. Después de que el agua hierva, añade el hígado de cerdo y las rodajas de jengibre y cocina bien el hígado de cerdo.
Paso 6: Recoge el hígado de cerdo, escurre el agua y retira la fascia del hígado de cerdo.
Paso 7: Forre una bandeja para hornear con papel engrasado y coloque los trozos de hígado de cerdo escurridos en la bandeja para hornear.
Paso 8: Coloca el molde para hornear en el horno precalentado y caliéntalo arriba y abajo a 120 grados. Sácalo y dale la vuelta varias veces en 40 minutos para evitar que se queme.
Paso 9: Pon el hígado de cerdo seco en el procesador de alimentos varias veces y tritúralo hasta convertirlo en polvo.
Paso 10: Vierte el hígado de cerdo triturado en el molde para horno y continúa horneando durante 10 minutos. Tenga cuidado de no dejar que se queme.
Paso 11: Después de asar el polvo de hígado de cerdo, puedes ponerlo en un procesador de alimentos y volver a batirlo, para que el polvo de hígado de cerdo quede más fino.
Paso 12: Busca un recipiente cerrado y guarda el hígado de cerdo en polvo en el frigorífico. Es mejor consumirlo en un mes. Así que no hagas demasiado a la vez.
Consejos:
Añade rodajas de jengibre para quitar el olor a pescado.
Asar el hígado de cerdo lentamente y a baja temperatura puede garantizar que el hígado de cerdo no quede blando.
Si el hígado de cerdo no está muy fino, puedes batirlo en un robot de cocina unas cuantas veces, o puedes tamizarlo y batirlo en un robot de cocina.
El polvo de hígado de cerdo seco se puede conservar en el frigorífico durante un mes. Se recomienda no hacer demasiada cantidad de una vez para evitar desperdicios.