Cómo hacer arroz frito, los consejos más auténticos
Las recetas y consejos más auténticos de arroz frito
El arroz frito, un snack tradicional con un sabor único, no sólo es crujiente y delicioso, sino que además tiene un rico valor nutricional. Si quieres hacer en casa el arroz frito más auténtico, no te puedes perder los siguientes métodos y consejos.
La selección del arroz es muy importante:
Un arroz frito de alta calidad es inseparable de una materia prima de alta calidad. Elija arroz integral de alta calidad con granos gruesos y uniformes, color brillante y textura dura. El arroz integral conserva las capas de germen y salvado y es más rico en nutrientes.
Remojo y eliminación de ácido:
El arroz integral debe estar completamente remojado antes de freírlo. Lave el arroz integral y remójelo en agua fría durante al menos 8 horas hasta que los granos de arroz absorban completamente el agua y se vuelvan tersos y suaves. Este paso no solo puede eliminar el sabor amargo del arroz, sino también mejorar el rendimiento del arroz frito.
Escurrir el agua:
Escurrir el arroz integral remojado y extenderlo en un lugar ventilado para que se seque. No lo exponga al sol durante el proceso de secado, de lo contrario los granos de arroz se secarán y endurecerán fácilmente, afectando el sabor del arroz frito. Deja secar los granos de arroz hasta que la superficie esté ligeramente seca, pero no los seques por completo.
Precalentar el wok:
A la hora de sofreír, utiliza una sartén o cazuela. Coloca la sartén al fuego y precalienta hasta que esté ligeramente caliente. Tenga cuidado de no poner el arroz en la olla fría, de lo contrario se calentará de manera desigual y la olla se quemará fácilmente.
Sofríe uniformemente:
Vierte una pequeña cantidad de aceite de cocina en la olla precalentada y pon el arroz integral escurrido en la olla. Encienda el fuego medio y saltee para mantener los granos de arroz calientes uniformemente. Durante el proceso de sofrito, sigue girando los granos de arroz con una espátula para evitar que se peguen a la sartén o se quemen.
Controlar el calor:
El calor es muy importante a la hora de freír arroz. Mantenga el fuego de bajo a medio y evite subir a fuego alto y freír rápidamente. Un incendio grande puede fácilmente hacer que los granos de arroz se quemen por fuera y crezcan por dentro, afectando el sabor. Freír a fuego medio-bajo para que los granos de arroz se calienten uniformemente y queden crujientes.
Sofríe hasta que esté dorado:
Durante el proceso de sofrito, los granos de arroz irán cambiando de color poco a poco, de blanco a amarillo claro, y luego a amarillo dorado. Cuando los granos de arroz estén fritos hasta que estén dorados y fragantes, apaga el fuego y retira de la sartén.
Enfriamiento y secado:
Saca los granos de arroz frito y extiéndelos en un lugar ventilado para que se enfríen. No selle durante el proceso de enfriamiento, de lo contrario los granos de arroz recuperarán fácilmente la humedad y se ablandarán, perdiendo su sabor crujiente. Después de enfriar, el arroz frito se puede almacenar en un recipiente sellado y consumir según sea necesario.
Consejos:
Elige arroz añejo: El arroz añejo tiene una textura más dura y sabe mejor después de freírlo.
Controla la cantidad de agua: No uses demasiada agua durante el remojo, de lo contrario los granos de arroz absorberán demasiada agua y se pegarán fácilmente a la sartén durante la fritura.
Sofríe constantemente: Ten paciencia y cuidado durante el proceso de sofrito, y sigue girando los granos de arroz para asegurar un calentamiento uniforme.
Calentamiento uniforme: al freír arroz, puedes agitar suavemente la olla para que los granos de arroz rueden continuamente en la olla y se calienten de manera más uniforme.
Evita que se queme: Presta siempre atención a la situación de la olla al freír. Una vez que los granos de arroz muestren signos de quemarse, apaga inmediatamente el fuego y retira de la olla.