Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimiento de las drogas - ¿Qué debo hacer si mi gato tiene insuficiencia hepática?

¿Qué debo hacer si mi gato tiene insuficiencia hepática?

1. Los resultados del CBC pueden estar dentro del rango normal o pueden mostrar anemia leve o un mayor recuento de glóbulos blancos.

2. Los resultados de las pruebas bioquímicas generalmente incluyen enzimas hepáticas elevadas, electrolitos anormales, bilirrubina elevada, albúmina y globulina elevadas, hipoglucemia, nitrógeno ureico en sangre bajo y colesterol bajo. También puede ayudar a descartar otras enfermedades.

3. El análisis de orina ayuda a evaluar el nivel de hidratación de los riñones y la PET, y puede revelar anomalías en la bilirrubina.

4. La disfunción de la coagulación no es infrecuente en las enfermedades hepáticas, por lo que se debe evaluar la función de la coagulación.

5. El ácido biliar sérico es un análisis de sangre emparejado que evalúa la función hepática antes y después de una comida. La prueba es muy segura y puede realizarse en su hospital veterinario local. Se puede realizar en mascotas con niveles normales de bilirrubina.

6. La prueba del nivel de amoníaco es un análisis de sangre. Si los resultados son anormales, generalmente significa enfermedad hepática. Sin embargo, la inexactitud de las pruebas es motivo de preocupación porque muchos factores pueden afectar los resultados de las pruebas y requieren medidas especiales.

Procesamiento.

7. Los resultados de la radiografía abdominal pueden estar dentro del rango normal o pueden mostrar derrame abdominal, agrandamiento o encogimiento del hígado.

8. En la mayoría de los casos, se recomendará una ecografía abdominal para evaluar todos los órganos abdominales, incluido el hígado, y descartar otros trastornos o enfermedades que pueden ser difíciles de diferenciar de la insuficiencia hepática en las etapas iniciales. . Generalmente se puede realizar una aspiración o una biopsia bajo guía ecográfica.

Obtener muestras de hígado para evaluación y cultivo/sensibilidad. Primero se debe realizar un análisis de coagulación. Sólo se puede obtener una muestra de tejido del hígado cuando los parámetros de coagulación están dentro de los límites normales. La ecografía generalmente se considera la mejor opción de herramienta de diagnóstico. Aunque el muestreo del tejido tumoral suele requerir sedación o anestesia general y conlleva algunos riesgos menores, la ecografía en sí es un procedimiento no invasivo, por lo que los veterinarios aún lo recomiendan. Pero estos procedimientos a menudo requieren la intervención de un especialista o la derivación a un hospital especializado.

Además de los métodos de diagnóstico anteriores, su veterinario puede recomendar pruebas adicionales para descartar o diagnosticar otras afecciones, o para realizar un diagnóstico más definitivo de insuficiencia hepática. Estas pruebas no son necesarias en todos los casos, pero pueden resultar útiles para algunas personas.

Las mascotas son beneficiosas y deben elegirse caso por caso. Estos incluyen:

1. Este procedimiento permite introducir instrumentos a través de pequeñas incisiones para visualizar y tomar muestras de las estructuras abdominales. Es más invasiva que la biopsia guiada por ultrasonido, pero permite la visualización directa del hígado y sus estructuras asociadas, lo que a menudo facilita mayores volúmenes vivos.

Comprueba. Sin embargo, requiere anestesia general y debe ser realizado por alguien con experiencia en cirugía y con instrumentos adecuados.

2. Laparotomía. Este es un procedimiento abdominal exploratorio que permite un examen detallado de todo el hígado y otras estructuras abdominales. Permite muestras de biopsia más grandes y se puede utilizar cuando se requiere alivio y desviación de la obstrucción biliar. Este proceso debe dejarse en manos de veterinarios profesionales experimentados en una instalación donde se pueda realizar un seguimiento postoperatorio riguroso.

Tratamiento en profundidad

Existen varios objetivos en el tratamiento de la insuficiencia hepática. Incluyen eliminar cualquier causa subyacente, proporcionar un entorno para que el hígado se recupere y controlar las complicaciones. Las mascotas con insuficiencia hepática suelen requerir hospitalización y tratamiento agresivo. Aunque el pronóstico inicial de supervivencia suele ser protector,

Si estos animales sobreviven unos días, es posible que se recuperen por completo. En este sentido, el diagnóstico de insuficiencia hepática es sumamente importante, ya que las opciones de tratamiento dependen del diagnóstico final.

1. La eliminación de cualquier enfermedad o factor subyacente como la leptospirosis o la eliminación de fármacos tóxicos es un aspecto importante del tratamiento.

2. Proporcionar un entorno para que el hígado descanse y se regenere es una de las partes más importantes del tratamiento.

3. Se debe proporcionar hospitalización y cuidados de apoyo en función de las necesidades de deshidratación, desequilibrio electrolítico e hipoglucemia, incluida la terapia con líquidos y electrolitos y la suplementación con glucosa intravenosa.

4. En algunos casos, puede ser necesaria una inyección intravenosa para proporcionar apoyo nutricional.

5. Las recomendaciones dietéticas para animales con enfermedad hepática incluyen la modificación de proteínas. Un dilema importante al formular dietas para animales con enfermedades hepáticas es que estos animales a menudo están desnutridos y, por lo tanto, deben mantener el peso corporal y la masa muscular mientras se minimizan los síntomas de insuficiencia hepática.

La calidad de la carne es crucial.

Actualmente existen en el mercado varias dietas recetadas diseñadas para proporcionar niveles bajos de proteínas de alta calidad, incluida la nueva dieta Hill's diseñada específicamente para animales con enfermedades hepáticas (Hill's Prescription Diet L/D_) y algunas bebidas caseras apropiadas.

Comer.

A continuación se explica cómo controlar las complicaciones de la insuficiencia hepática en gatos:

1. En el tratamiento se pueden utilizar diuréticos (fármacos que favorecen la eliminación de líquidos), como la espironolactona.

2. Es necesario el tratamiento de la encefalopatía hepática (enfermedad que afecta al sistema nervioso central, secundaria a una enfermedad hepática avanzada). Lactulosa (Chronulac_) es un medicamento que retarda la absorción intestinal de amoníaco y debe tomarse por vía oral o como enjuague rectal.

Este medicamento debe diluirse con agua tibia antes de su uso. Los enemas de neomicina también pueden ser útiles. Se recomiendan antibióticos orales como neomicina o metronidazol.

El tratamiento del edema cerebral es sumamente importante. Se debe considerar el uso combinado de manitol, furosemida (Lasix_) y suministro de oxígeno en las primeras etapas de la enfermedad.

Las úlceras gastrointestinales se pueden tratar con medicamentos que reducen la producción de ácido estomacal. La cimetidina (Tagamet_), famotidina (Pepcid_), ranitidina (Zantac_), misoprostol (Cytotec_) y omeprazol pueden acelerar la recuperación de una enfermedad hepática.

Úlceras gastrointestinales.

Algunos pacientes pueden considerar el uso de antieméticos para reducir los vómitos. La metoclopramida (Reglan_) o la clorpromazina_ (Chlorpromazine_) son buenas opciones.

6. Los trastornos de la coagulación relacionados con la enfermedad hepática deben tratarse con inyecciones de vitamina K o el uso de plasma fresco congelado.

Cuidados posteriores a la insuficiencia hepática felina

La mejor forma de tratar a tu mascota es combinar los cuidados domiciliarios con los cuidados veterinarios profesionales. El tratamiento de seguimiento es crucial, especialmente si los síntomas de su mascota no mejoran de manera oportuna.

Asegúrese de tomar todos los medicamentos recetados y la dieta estrictamente según las indicaciones de su médico. Si encuentra algún problema mientras trata a su mascota, notifique a su veterinario de inmediato.

Además, se debe controlar la sangre cada dos días durante las primeras etapas del tratamiento, y luego semanalmente o mensualmente dependiendo de la causa subyacente.