¿Puedo comer huevos fritos después de una cesárea?
Comer huevos después de una cesárea puede ayudar a que el organismo se recupere lo más rápido posible, pero hay que prestar atención a la mejor alimentación y no comer demasiado. Mamá puede comer uno o dos huevos al día, pero no demasiados. Comer demasiados huevos sólo aumentará la carga sobre el estómago y evitará que se absorban más nutrientes.
Además de comer huevos para complementar las proteínas, las mujeres embarazadas también pueden conseguir el mismo propósito ingiriendo otros alimentos, como beber leche. Si no te gustan los huevos, también puedes beber leche y comer más pescado y camarones para complementar las proteínas.
En definitiva, tras una cesárea, la madre no puede descuidar su alimentación y debe tomar medidas razonables. Al ingerir nutrientes ricos, el cuerpo puede recuperarse lo más rápido posible y al mismo tiempo satisfacer las necesidades nutricionales de la lactancia.