¿Qué debo hacer si mi perro tiene hiperplasia del tercer párpado?

La hiperplasia del tercer párpado, también conocida como adenoma del párpado, es un problema ocular común en los perros. En esta afección, el tercer párpado de su perro (una membrana debajo de la conjuntiva) desarrolla bultos o tejido de granulación, lo que a menudo causa malestar e inflamación ocular. Los siguientes son algunos métodos para afrontar la situación:

1. Lleve a su perro al veterinario lo antes posible para que le diagnostiquen y confirmen la afección. Su veterinario confirmará el diagnóstico mediante inspección visual o tomando una muestra.

2. Generalmente, los veterinarios recomendarán la extirpación quirúrgica de la hiperplasia. Durante la operación, el médico intentará preservar el tercer párpado del perro para mantener la función normal de protección ocular.

3. Los cuidados postoperatorios son muy importantes para garantizar que la herida del perro esté limpia y seca. Su médico puede recomendarle un ungüento antibiótico para los ojos para prevenir infecciones.

4. Revisión periódica, el veterinario comprobará la recuperación del perro y orientará los cuidados y tratamientos posteriores.