La diferencia entre la enteritis canina y los pollos y perros inquietos; la prevención es la clave para las enfermedades de alto riesgo.
Por diferentes causas, el vómito puede estar mezclado con sangre, bilis e incluso fragmentos de mucosa. El perro enfermo tiene una mayor sensación de sed, pero vomita después de beber agua. Pérdida de apetito o negativa a comer, o malestar con dolor abdominal. Cuando los vómitos son intensos, pueden aparecer síntomas de deshidratación o desequilibrio electrolítico. Al revisar la cavidad bucal, a menudo se puede ver una saburra de lengua amarilla y blanca y oler un olor desagradable.
Los síntomas leves incluyen vómitos, diarrea y heces con sangre, que se presentan principalmente en cachorros menores de 3 meses que no han sido vacunados o tienen las vacunas incompletas. Son muy similares a los síntomas de la enteritis. Hoy en día existen tiras reactivas especiales para realizar pruebas a menores, lo que resulta muy conveniente para diagnosticar a menores.
Si se determina que el perro es pequeño, acuda al hospital para recibir tratamiento a tiempo. No crea en los llamados remedios caseros y retrase el mejor momento de tratamiento, porque el tamaño pequeño tiene poco que ver con la alimentación del perro, sobre todo porque el entorno donde vive está contaminado por el parvovirus.
Consejos para la enteritis canina 1. Tenga cuidado de no alimentar a su perro con chocolate, helado, leche y otros alimentos que fácilmente puedan provocar enteritis en su vida diaria.
2. Mejorar la propia inmunidad del perro, vacunarlo periódicamente y suplementarle vitaminas diariamente.
3. El entorno de vida del perro debe ser limpio e higiénico.
4. Presta atención a la diferencia entre diarrea y enteritis: depende principalmente de si el perro está deshidratado y pierde peso al vomitar. Los perros pequeños estarán obviamente deshidratados si vomitan unas tres veces. Las cuencas de los ojos son profundas y el cuerpo se vuelve muy delgado, lo que son síntomas evidentes de deshidratación.
5. Si la enfermedad del perro no se puede resolver, llévelo a ver a un médico especialista en mascotas para evitar retrasar la afección.
¿Cómo prevenir la enteritis y el mal genio en perros? 1. Vacúnese regularmente. La vacuna de seis componentes para perros domésticos tiene una protección inmunológica baja. Se recomienda inyectar la vacuna de dos componentes para perros importados. La inyección se puede administrar a cachorros que estén sanos durante más de 45 días. Dependiendo de la marca, se requieren una o dos inyecciones. La vacuna combinada es la vacuna contra el parvovirus canino y el moquillo canino.
2. Aislar a los perros enfermos y desinfectar minuciosamente los suministros para perros.
3. Utilizar los medicamentos de forma racional y no abusar de antibióticos y otros fármacos.
4. Coma de forma razonable para evitar el hambre y la saciedad desiguales. El hambre excesiva en los perros puede provocar comer en exceso, indigestión y gastroenteritis.
5. Fortalece la nutrición y potencia la resistencia. Cuando la resistencia de un perro disminuye, su función de barrera gastrointestinal también se debilita en consecuencia, lo que lleva a la proliferación de bacterias patógenas intestinales y, finalmente, a la gastroenteritis. Complementa los probióticos, repara la mucosa gástrica y mejora el equilibrio microecológico de las enfermedades gástricas.
6. Evite el uso excesivo de antibióticos. El uso de antibióticos puede provocar un desequilibrio de la flora intestinal, provocando sobreinfección y gastroenteritis.
7. Fortalecer la gestión. Evite que los perros sufran gastroenteritis causada por comer alimentos sucios. La gastroenteritis canina debe tratarse lo antes posible para evitar su recurrencia o el desarrollo de problemas más graves, como el cáncer gástrico.