¿Qué debes hacer si a tu perro se le rompe la pata?
En perros con fracturas de patas, se recomienda determinar primero las circunstancias específicas de la fractura. Si la fractura es menor y el perro es joven, se puede considerar la fijación externa. Si la fractura es grave, el perro es mayor y su capacidad de autocuración empeora, es posible que también sea necesario considerar la corrección quirúrgica.
Un perro con una pata rota no puede moverse con normalidad. La pata rota no puede soportar peso, ni puede doblarse ni enderezarse bien. Además, cuando escucha con atención, es posible que escuche un sonido de raspado en los extremos rotos de los huesos. El tratamiento de la fractura de un perro no es sencillo. Cuando se descubre que un perro tiene una fractura, se puede tratar con urgencia en el lugar. Si la fractura es tan grave que no puede moverse, es mejor no moverse. Busque una tabla de madera grande y mueva al perro en paralelo a ella. Después de una simple fijación en la tabla de madera, es hora de enviar al perro al médico para recibir tratamiento.
No importa qué método se utilice, se recomienda que el dueño lleve al perro al hospital de mascotas para recibir tratamiento lo antes posible para evitar retrasar la afección.
Trate de no dejar que el perro haga ejercicio en la etapa inicial del tratamiento postoperatorio y de la recuperación. Puede tomar algunos medicamentos antiinflamatorios, analgésicos, rompehuesos, tabletas Gulden con alto contenido de calcio y otros medicamentos nutricionales. Equilibra bien la nutrición del perro y fortalece el crecimiento óseo del perro. En la etapa posterior, puede hacer ejercicio moderado, tomar el sol y complementar la Crema Nutricional Guden para restaurar la función motora.