La ciba es un alimento glutinoso, dulce y delicioso. ¿Pueden los niños comer más?
Creo que los niños pueden comer más pasteles de arroz elaborados con soja. Después de todo, la soja tiene el mayor valor nutricional en comparación con otras legumbres, sobre todo porque la leche que bebemos habitualmente contiene soja, por eso se la conoce como "leche pura verde". Entonces, ¿cómo hacemos hoy este pastel de frijoles? A continuación, les traeré el siguiente proceso.
El método de elaboración de este tipo de torta de judías es muy sencillo, sobre todo la soja recién frita de la olla. Tiene un sabor delicioso y es rico en muchos nutrientes. También puede complementar los aminoácidos que necesitan los niños. Primero prepara los ingredientes: soja, harina de arroz glutinoso, azúcar, semillas de sésamo (blancas o negras) cocidas y agua caliente. Cuando estés listo, deberías empezar a hacerlos. Primero, remoja la soja que compraste con anticipación. Entonces llega el momento de amasar la masa. Primero, acondiciona tu piel. Haga un pequeño agujero en el medio de la harina de arroz glutinoso, luego agregue aproximadamente la misma cantidad de agua caliente, revolviendo mientras vierte. Si a tus hijos les gustan los dulces, puedes agregar un poco de azúcar y revolver hasta que puedan colgar de los palillos. Después de revolver, séllelo con film transparente y haga algunos pequeños agujeros en la superficie con un palillo. Se hace el agujero para cocinar al vapor, se hierve agua, se pone la mezcla de arroz glutinoso en la olla y se cuece al vapor. Preste atención al tiempo durante el proceso de cocción al vapor, luego coloque la pasta de frijoles fritos en una máquina rompe paredes y muélala hasta convertirla en polvo. Coloque el polvo de soja batido en un recipiente grande, revuélvalo con palillos para disipar el calor y luego agregue el. Semillas de sésamo negro o blanco preparadas Mezcle todas las semillas de sésamo. Finalmente, saque las bolas de arroz glutinoso al vapor de la olla y enróllelas en bolitas, luego envuélvalas todas en un recipiente grande.
Esta especie de bizcocho de judías está listo, está riquísimo y no mancha los dientes. Es una buena pareja de postres que les gusta comer a los niños. Si aprende bien, puede intentar hacerlo con sus propios hijos.