El yodo no se puede complementar de manera casual. En caso de deficiencia de yodo, se puede realizar alguna suplementación. ¿Cuáles son las precauciones para la suplementación con yodo?
1. Las mujeres embarazadas, los bebés y los fetos pueden suplementar más yodo de lo habitual. Si la mujer embarazada tiene deficiencias graves, provocará algunos síntomas en el feto. Sin embargo, la ingesta diaria de yodo de las mujeres embarazadas no debe exceder los 300 microgramos.
2. Cuando un bebé tiene menos de dos años, el desarrollo cerebral es muy importante. En este momento se necesita suficiente yodo para estimular la secreción de hormona tiroidea. La hormona tiroidea es una hormona esencial que promueve el crecimiento de los nervios y el cerebro. Por lo tanto, en este momento debe haber suficiente hormona tiroidea para estimular el desarrollo del cerebro, por lo que se debe ingerir suficiente yodo. Si la ingesta de yodo durante este período es insuficiente, el cerebro del bebé estará subdesarrollado y su inteligencia se quedará atrás. Si hay pequeñas deficiencias, también provocará una reacción lenta, falta de inteligencia y un coeficiente intelectual bajo.
3. Las personas mayores no pueden consumir demasiado yodo. De lo contrario, un alto contenido de yodo puede provocar hipertensión arterial y otras enfermedades. Las personas que comen mariscos con frecuencia ya no pueden consumir yodo porque los mariscos contienen una gran cantidad de yodo, que puede satisfacer las necesidades del cuerpo. Los pacientes con hipertiroidismo deben dejar de usar sal yodada para evitar que la afección empeore.
El yodo tiene un gran efecto en el cuerpo humano. Cuando tengas deficiencia de yodo, puedes complementarlo adecuadamente, pero recuerda no sufrir una sobredosis. De lo contrario, también provocará algunas enfermedades.