El daño del azufre a los seres humanos, animales y plantas
El azufre es una sustancia química peligrosa poco tóxica, pero su vapor y dióxido de azufre producidos por la combustión de azufre son altamente tóxicos para humanos o animales. Generalmente por inhalación, ingestión o absorción cutánea. La mayor parte del exceso de azufre que ingresa al intestino se oxidará rápidamente en compuestos de azufre no tóxicos y se excretará a través de los riñones y los intestinos. El sulfuro de hidrógeno libre no oxidado tendrá efectos tóxicos en el cuerpo. El sulfuro de hidrógeno es un poderoso agente nervioso que tiene evidentes efectos irritantes en la mucosa gastrointestinal y el tracto respiratorio. El sulfuro de hidrógeno se combina con el hierro férrico en la citocromo oxidasa oxidada, inhibe la actividad de la enzima, dificulta el proceso redox en tejidos y células y causa asfixia tisular y celular, que se manifiesta como síntomas del sistema nervioso central y asfixia.
2. Daño a las plantas:
El azufre se quema para producir dióxido de azufre, que ingresa a los estomas de las plantas y se descompone con el agua para producir ácido sulfuroso, trióxido de azufre e hidrógeno. El primero perjudica directamente la salud del dióxido de azufre y las reacciones enzimáticas, mientras que el segundo reduce el valor del PH, cierra los estomas, elimina el magnesio de la clorofila y hace que las hojas de las plantas se pongan amarillas o incluso mueran.