El impacto del exceso de minerales en los cerdos, conocimiento sobre la crianza de cerdos
Sin embargo, si se toma en exceso, provocará consecuencias adversas e incluso la muerte por intoxicación.
l.Sodio y cloruro: Los cerdos tienen poca tolerancia al exceso de cloruro de sodio, especialmente cuando la cantidad de agua que beben es limitada. Si la materia seca de la dieta contiene un 1% de sal, puede provocar intoxicaciones. .
Los efectos tóxicos de la sal se manifiestan principalmente como una fuerte estimulación de la mucosa gastrointestinal y parálisis nerviosa tras su absorción.
La intoxicación por sal en cerdos suele estar causada por una alimentación excesiva con piensos ricos en sal, como residuos de salsa, harina de pescado salada, etc. o los cerdos ingieren repentinamente una gran cantidad de sal debido a una deficiencia de sal prolongada.
La intoxicación por sal en cerdos suele ocurrir en grandes grupos y la tasa de mortalidad es alta.
La dosis letal de sal para los cerdos es de 100 a 250 gramos, y suelen morir entre L y 6 días.
2. Calcio y fósforo: Los cerdos tienen una fuerte tolerancia al exceso de calcio y fósforo, por lo que las dietas con alto contenido en calcio y fósforo no provocarán intoxicaciones.
Sin embargo, cuando los cerdos comen dietas altas en calcio y fósforo, interferirán con el metabolismo y la utilización de otros elementos, causando daños a la salud del cerdo.
En la alimentación real, se debe prestar especial atención al exceso de calcio en dietas altas en calcio, que puede inducir una deficiencia de zinc en los lechones. El exceso de fósforo puede interferir con el metabolismo y la utilización del calcio, causar hiperparatiroidismo y causar daño óseo; Se liberan grandes cantidades de calcio y fósforo a la sangre, provocando osteoporosis y propensión a fracturas y cojeras.
——En circunstancias normales, el contenido de calcio de la materia seca de la dieta no debe exceder el 1% y el contenido de fósforo no debe exceder el 0,75-0,9%.
3. Hierro: Los lechones son muy sensibles al exceso de hierro, si el aporte supera las necesidades reales, afectará a la ingesta de pienso y a la digestión, si es excesivo, incluso puede provocar intoxicaciones.
Los experimentos han demostrado que los lechones pueden envenenarse y morir si cada lechón ingiere entre 4OO y 5OO mg de hierro al día.
4. Zinc: El exceso de zinc afectará la absorción de hierro y cobre en los cerdos, provocando anemia.
Los cerdos tienen una fuerte tolerancia al exceso de zinc, pero si supera los 15OO-2000 mg/kg de materia seca del pienso, se producirá intoxicación.
5. Selenio: El selenio es muy tóxico, por lo que hay que evitar que los cerdos lo alcancen.
La dosis tóxica de selenio para los cerdos es de 5-8 mg/kg de materia seca del pienso.
La intoxicación por selenio en cerdos se puede dividir en dos tipos: crónica y aguda.
La intoxicación crónica se manifiesta como anorexia, insuficiencia hepática, infiltración de grasa hepática, degeneración e hinchazón renal, grietas en los cascos y caída del cabello. La intoxicación aguda se manifiesta como dificultad para respirar, diarrea, somnolencia y, finalmente, la muerte debido al agotamiento extremo.
6. Yodo: Los cerdos tienen una demanda muy pequeña de yodo. Si continúa el suministro excesivo, pueden producirse una serie de síntomas de intoxicación como salivación, aumento de la secreción nasal y congestión traqueal. Para prevenir la intoxicación por yodo en los cerdos, el contenido de yodo en la materia seca del alimento no debe exceder los 4-5 mg/kg.
7. Cobre: La dosis de tolerancia del cerdo al cobre en el pienso es de 250 mg/kg. Cuando los cerdos consumen cobre en exceso o sus células hepáticas se dañan, el cobre se acumula en el hígado y otros tejidos, lo que puede provocar una intoxicación aguda o crónica por cobre. Intoxicación aguda: los síntomas tardan más de varias horas en aparecer entre 1 y 2 días después de comer, por lo que se requiere un tratamiento breve y urgente. Los síntomas principales son gastroenteritis, rechazo de alimentos, salivación, vómitos, sed, dolor abdominal, diarrea y heces verdes o azules, mezcladas con mocos y sangre, y con mal olor. Los músculos están relajados, la marcha es inestable y la frecuencia cardíaca aumenta. Algunos perdieron el conocimiento y sufrieron convulsiones; algunos desarrollaron rápidamente síntomas de shock y murieron en más de 24 horas. Intoxicación crónica: los cerdos enfermos suelen presentar apatía, dificultad para respirar, membranas mucosas pálidas y amarillas y hemoglobina en la orina. , a menudo acompañado de ictericia, picazón en la piel y disqueratosis.