Hay dos categorías: benignos y malignos. La causa es desconocida y los cambios patológicos incluyen hiperplasia folicular tiroidea y agrandamiento del tejido tiroideo. La textura benigna es blanda, la textura maligna es dura. Benigno: la mayoría de los bultos en el cuello son únicos, crecen lentamente y, en ocasiones, pueden presentar síntomas de compresión. El bulto se mueve hacia arriba y hacia abajo al tragar, es liso, blando, redondo u ovalado y puede causar hipertiroidismo. Cuando el tumor es pequeño, se puede reducir y desaparecer mediante irradiación con un dispositivo terapéutico general; cuando el tumor es demasiado grande, se debe extirpar quirúrgicamente y luego irradiarse, lo que puede lograr los objetivos de reducir la inflamación, aliviar el dolor y reducir la hinchazón; , acelerando la cicatrización de heridas y previniendo infecciones y cicatrices. Es fácil recaer después del tratamiento quirúrgico y la tasa de recurrencia llega al 90%, lo que dificulta su curación. Si no se trata (porque no hay síntomas evidentes: no hay dolor ni picazón), se convertirá en una enfermedad refractaria o empeorará hasta convertirse en cáncer de tiroides. Podrás elegir un tratamiento de medicina tradicional china en el futuro.
Uno de cada 10 tumores benignos de tiroides puede convertirse en tumores malignos, lo que también puede estar relacionado con la exposición a la radiación. Los tumores malignos de tiroides se pueden dividir en adenocarcinoma papilar, adenocarcinoma folicular, carcinoma anaplásico, carcinoma medular, carcinoma de células escamosas y linfoma. Hay un bulto en el cuello de la glándula tiroides o sus proximidades, de textura dura y desigual. No hay síntomas obvios en la etapa inicial, pero en la etapa tardía, puede ocurrir ronquera, dificultad para respirar o tragar, dolor en la almohada y los hombros o diarrea y palpitaciones. Síntomas como enrojecimiento facial e hipocalcemia. Cualquier persona diagnosticada con cáncer maligno de tiroides debe someterse a resección quirúrgica o terapia con yodo radiactivo y quimioterapia según el tipo patológico. La radioterapia se puede realizar con equipo de tratamiento general.