¿Puede el cáncer de recto comer comida picante?
Es mejor no comerlo. Lo mejor es comer alimentos menos excitantes. El cuerpo es tuyo. ¡Te deseo una pronta recuperación!
Después de la cirugía de cáncer de recto, me curé clínicamente y me dieron el alta. Mi tolerancia gastrointestinal me permitió comer ocasionalmente comida picante para aliviar mi apetito.
Si estás en tratamiento o te han diagnosticado recientemente, o te estás recuperando, debes ingerir alimentos líquidos o semilíquidos, ligeros y de fácil digestión.
En general, no existe ninguna investigación científica clara que demuestre la relación entre el consumo de alimentos picantes y el crecimiento del cáncer y el pronóstico de los pacientes. Sin embargo, en la práctica clínica, los médicos exigirán que durante la quimioterapia el paciente siga una dieta ligera y fácil de digerir y trate de evitar los alimentos picantes.
La razón puede ser que los propios fármacos de quimioterapia pueden provocar molestias gastrointestinales, náuseas, vómitos, diarrea y otros efectos secundarios. Si comes alguna comida picante, estas reacciones pueden agravarse y provocar molestias gastrointestinales. Algunas personas también desarrollan dolor de garganta y úlceras. Si casi te has recuperado, comer algo de comida picante te provocará dolor abdominal, diarrea, disfunción intestinal y otros síntomas, lo que no favorece la recuperación.
¿Cuáles son los tabúes dietéticos para los pacientes con cáncer de recto? 1. Evite los alimentos indigeribles y propensos a las flatulencias, como arroz glutinoso, tortas pegajosas, puerros, boniatos, frijoles, etc.
2. Evite comer alimentos ricos en grasas y proteínas animales, fritos, horneados, mohosos, encurtidos y procesados, así como alimentos crudos, fríos, picantes e irritantes para evitar dolores abdominales y diarreas. y sangrado, agravando el dolor del paciente.
3. Coma más frutas y verduras frescas, alimentos ricos en fibra y fáciles de digerir y beba más agua, incluidas sopas ricas en nutrientes.
De hecho, la mayoría de los cánceres del tracto digestivo son causados por la alimentación. Comer en exceso, comer de forma irregular, comer pollo frito, comer comida rápida, hacer barbacoas y comer comidas copiosas puede dañar los intestinos. Al mismo tiempo, las emociones también pueden tener un impacto grave en el tracto gastrointestinal. Las personas que suelen vivir una vida acelerada deberían sentirse así. Son propensos a sufrir dolor de estómago cuando están nerviosos, ansiosos o de mal humor. Puede que no sientan nada cuando son jóvenes, pero cuando tengan 30 años tendrán gastritis y se enojarán.
Por eso, por el bien de la salud, es mejor deshacerse de los malos hábitos alimentarios y de vida y aprender a aliviar el estrés. Si el tiempo lo permite, se recomienda realizarse un examen físico una vez al año para garantizar su salud.