Los efectos y métodos de consumo de la pera de otoño.
Peras guisadas
Comer peras guisadas con regularidad puede aumentar el líquido corporal en la boca y prevenir la sequedad de los labios. No sólo puede proteger la garganta, sino que también es una buena terapia alimentaria para la neumonía, la bronquitis y la hepatitis.
Sopa de pera con azúcar de roca
Retirar el corazón de la pera cruda, rellenarla con 10g de azúcar de roca, 5g de Fritillaria y una cantidad adecuada de agua, guisar a fuego lento y comer peras con sopa para prevenir y tratar resfriados y tos exógenos, flemas y otras enfermedades.
No es aconsejable comer demasiado.
En otoño, el clima se vuelve más fresco y no todo el mundo puede disfrutar de las delicias de las fragantes peras, y mucho menos comerlas porque son frías por naturaleza. El exceso de comida puede dañar el mal humor del yang, la diabetes crónica, las personas con deficiencia de yang, las extremidades frías, el abdomen débil y las mujeres embarazadas. Es mejor no comerlo crudo, no cocinarlo al vapor en agua ni cocinarlo en sopa.