Los beneficios de la compresa caliente para el dolor de rodilla (cuáles son los beneficios de la compresa caliente para el dolor de rodilla)
Para evitar el dolor de rodilla cuando seas mayor, debes prestar atención a proteger tus rodillas cuando seas joven. En la vida diaria, preste atención al aislamiento de las rodillas; lo mejor es elegir terrenos blandos para los ejercicios de carrera, como pistas de goma, cintas de correr, etc. Cuando vaya cuesta abajo, sea constante, lento y suave. Además, la compresa caliente también es una forma eficaz de protección.
La compresa caliente puede dilatar los vasos sanguíneos, mejorar la circulación sanguínea local, promover el metabolismo local, aliviar los espasmos musculares, relajar los nervios y mejorar la flexibilidad de los tendones. Las compresas calientes se dividen en compresas calientes secas y compresas calientes húmedas. La compresa caliente seca consiste en utilizar una bolsa de agua caliente para aplicar la compresa caliente en la rodilla durante 20 a 30 minutos cada vez, de 1 a 3 veces al día. Una compresa húmeda y caliente consiste en remojar una toalla o gasa en un recipiente con agua caliente, sacarla y girarla hasta que esté semiseca, aplicarla sobre la rodilla y cubrirla con un algodón para evitar la pérdida de calor. Cámbialo cada 5 minutos y aplícalo durante 20-30 minutos, 1-3 veces al día.
La temperatura de la compresa caliente no debe ser demasiado alta. No debe utilizarse en pieles con inflamación aguda, tromboflebitis, enfermedad vascular periférica y heridas. Después de aplicar una compresa caliente, frótela alrededor de la articulación de la rodilla durante 2 a 5 minutos para promover la circulación sanguínea.
Los pacientes con dolor de rodilla pueden lograr el propósito de tratar el dolor de rodilla mediante el cuidado diario, que también es una forma eficaz y saludable de tratar el dolor de rodilla. También se recomienda que los pacientes con dolor en la articulación de la rodilla mantengan una actitud optimista y positiva hacia el tratamiento. Los pacientes también pueden relajar el cuerpo haciendo ejercicios de Tai Chi, pero la intensidad debe ser moderada para evitar imponer una carga adicional al cuerpo.