¿La carne alrededor de la articulación de la rodilla está hinchada?
Si se produce hinchazón de la articulación de la rodilla, se considera que está causada por un derrame articular, como una rotura de menisco o una lesión del ligamento cruzado de la articulación provocada por una lesión deportiva. Puede ir acompañado de síntomas de dolor o hinchazón causados por la inflamación de la propia articulación de la rodilla, junto con rigidez articular y movilidad limitada. El diagnóstico se puede realizar primero mediante métodos de imagen. Los métodos de tratamiento incluyen principalmente fármacos, acupuntura y fisioterapia. Si hay demasiado líquido, también se puede pinchar y extraer directamente, lo que ayudará a mejorar el rango de movimiento de esta articulación.
En primer lugar, debemos comprender las estructuras relacionadas con la inflamación de la cápsula articular. La cápsula articular es una de las estructuras de la articulación. Es como una cápsula que rodea toda la articulación. La cápsula articular contiene líquido sinovial, que nutre y lubrica las articulaciones para que puedan moverse con suavidad (como el aceite lubricante). La cápsula articular actúa como un recipiente para contener el líquido en la articulación de la rodilla.
Cuando se acumula un exceso de líquido en la cápsula, la hinchazón de la rodilla suele producirse por dos motivos:
a) Sangrado articular: También conocido como sangrado articular, suele estar provocado por una lesión, La hinchazón de la rodilla puede ocurrir rápidamente en cuestión de minutos. La hinchazón puede ser tan intensa que la rodilla se siente muy tensa.
b) Derrame sinovial: también conocido como derrame o derrame articular de la rodilla. Este tipo de hinchazón de la rodilla tiende a ocurrir gradualmente y puede desaparecer y reaparecer con diversos grados de gravedad.
La hinchazón de la rodilla suele desarrollarse de cuatro formas:
Hinchazón rápida: Ocurre inmediatamente después de una lesión.
Hinchazón tardía: se produce horas después de la lesión.
Hinchazón progresiva: no se produce daño, suele ser recurrente.
Hinchazón rápida: aparece repentinamente sin lesión
Hinchazón rápida después de una lesión
Las rodillas que se hinchan a los pocos minutos de una lesión suelen ser causadas por sangre en la articulación. Las estructuras internas de la rodilla se dañan y comienza el sangrado, aumentando la presión sobre la articulación.
Normalmente, esta hinchazón es más grave, con tensión y dolor intensos, y suele ir acompañada de hematomas.