¿A qué debes prestar atención al bañar a tu bebé?
Primero, tenga cuidado de no dejar que entre agua en los oídos, los ojos, la nariz y la boca de su bebé.
Porque si el agua entra en estas partes, no solo hará que el bebé se sienta particularmente incómodo, sino que también traerá bacterias del agua a estas partes y provocará inflamación.
Además, una vez que el bebé se bañe, le traerá estos recuerdos incómodos y se resistirá a bañarse en el futuro. Imagínese cuánto dolor de cabeza tendrá la madre si el bebé no coopera con el baño.
Una forma sencilla de evitar que entre agua en estas zonas es colocar la cabeza de tu bebé, que es la zona situada encima del cuello, sobre tu antebrazo izquierdo, con la palma izquierda justo apoyando su espalda y dejando que tu bebé se siente. en su trasero, colóquelo en el suelo pélvico o de pie, y luego tome la toalla con la mano derecha para bañar al bebé. Es seguro y conveniente.
En segundo lugar, presta atención a la temperatura del agua. La temperatura del agua para bañar al bebé suele rondar los 38 grados.
El sobrecalentamiento puede quemar fácilmente la delicada piel del bebé, y el enfriamiento excesivo puede hacer que el bebé se resfríe fácilmente. Si no puede medir la temperatura aproximada a mano en la etapa inicial, es mejor comprar un medidor de temperatura del agua y colocarlo en el recipiente, y luego colocar al bebé cuando la temperatura del agua sea adecuada. Cuando adquieras competencia, sabrás la temperatura del agua. Temperatura del agua que toca la muñeca de un adulto para realizar pruebas cutáneas. Si los adultos piensan que la temperatura es moderada, la temperatura del agua es básicamente la adecuada para que el bebé baje.
El tercero también es crucial, sobre todo cuando el bebé es mayor y quiere jugar un rato en la bañera o la tina. En este momento, debes recordar que los adultos no pueden salir.
Algunos medios informaron que como el bebé se estaba divirtiendo mucho en la bañera y los adultos tenían algo que hacer, pensaron que estaría bien que el bebé jugara solo en el agua. Como resultado, después de que los adultos se fueron, el niño accidentalmente se resbaló y cayó en la bañera porque la bañera estaba demasiado resbaladiza. Luchó por un tiempo... Cuando la madre regresó unos minutos después, el bebé se había ahogado y allí estaba. no hay esperanza.
Por eso bañar a tu bebé es lo más común y diario, y además es algo que no se puede tomar a la ligera. Los adultos deben tratar este asunto con precaución, paciencia y delicadeza para dejar una buena impresión en el baño del bebé.