¿Hay algo especial en la preparación de ropa de cama y almohadas para su bebé?
Esto se debe a que:
1. La columna del recién nacido está recta y aún no ha formado una curvatura fisiológica. Cuando está acostado, la espalda y la cabeza están en el mismo plano, lo que no provocará tensión muscular ni rigidez en el cuello.
2 Los recién nacidos tienen cabezas grandes, casi iguales al ancho de los hombros. Es natural que estén acostados. y duerma de lado, y no hay necesidad de almohada.
3. El cuello del recién nacido es muy corto y la cabeza está levantada, lo que resulta muy incómodo y puede provocar fácilmente que la cabeza y el cuello se doblen, afectando la respiración y la deglución del recién nacido, pudiendo incluso provocar accidentes.
¿Cuándo darle una almohada a tu bebé? ¿Qué altura tienen las almohadas?
1. Si algunos recién nacidos experimentan desbordamiento de leche o vómitos, pueden levantar ligeramente la parte superior del cuerpo o doblar 2 o 3 capas de toallas como almohadas para evitar los vómitos.
2. Cuando el bebé tiene tres o cuatro meses, la columna cervical comienza a inclinarse hacia adelante. En este momento, puedes dormir sobre una almohada de 1 cm de altura.
3. Cuando el bebé aprende a sentarse durante los siete u ocho meses, la columna torácica del bebé comienza a doblarse hacia atrás y los hombros se desarrollan y se ensanchan. En este momento, el niño debe dormir con una almohada de 3 cm de altura.
Las almohadas demasiado altas o demasiado bajas no favorecen el sueño de su bebé ni su desarrollo físico normal.
¿Cuál es la posición para dormir más saludable para los recién nacidos?
¿Cuál es la mejor posición para que duerma un recién nacido? En circunstancias normales, la mayoría de los recién nacidos duermen boca arriba, porque esta posición para dormir puede relajar los músculos de todo el cuerpo y ejercer la menor presión sobre los órganos internos del recién nacido, como el corazón, el tracto gastrointestinal y la vejiga. Sin embargo, al dormir boca arriba, la base de la lengua se relaja y cae hacia atrás, bloqueando la garganta y afectando la suavidad del tracto respiratorio. Si coloca una almohada más alta para su recién nacido, empeorará la dificultad para respirar. En este momento, conviene observar de cerca el sueño del recién nacido.
Es mejor no dormir boca abajo, porque los recién nacidos en este período no pueden levantar la cabeza, girarla o darse la vuelta, y no tienen capacidad para protegerse. Por lo tanto, dormir boca abajo es propenso a sufrir asfixia accidental. Además, dormir boca abajo ejerce presión sobre los órganos internos, lo que no favorece el crecimiento y desarrollo de los recién nacidos.
Debido a que el estómago del recién nacido está en posición horizontal, los músculos cardias en la entrada del estómago están relajados y los músculos del píloro en la salida están tensos, por lo que los recién nacidos son propensos a desbordar la leche después de alimentarse. En casos graves, la leche que se desborda puede provocar asfixia por inhalación en la tráquea. Por lo tanto, estos recién nacidos pueden acostarse sobre su lado derecho después de alimentarse y pueden acostarse después de 0,5 a 1 hora.
Además, la elección de la ropa de cama del bebé también se hace con conocimiento de causa.
En los primeros siete días de vida de un recién nacido, el tiempo de sueño suele ser más largo que el de vigilia, y la mayor parte del tiempo de vigilia lo pasa en una cama pequeña. Por eso, la calidad de la ropa de cama es muy importante.
La ropa de cama del recién nacido debe prepararse por separado, 1-2 juegos, adecuada para camas pequeñas. La colcha debe estar hecha de algodón de color claro o franela fina y la guata debe estar hecha de algodón nuevo. Debido a que el algodón viejo no es cálido ni higiénico, es mejor no utilizar neumáticos de algodón viejos. La colcha no debe ser demasiado gruesa ni demasiado grande, generalmente alrededor de una libra por cama, y el tamaño debe ser adecuado para el tamaño de la cama pequeña. Es necesario preparar dos edredones para facilitar el lavado y cambio, y se pueden aumentar o disminuir según las estaciones. Se puede utilizar una colcha en primavera y otoño, y dos colchas en invierno.
También puedes preparar 2-3 fundas de edredón pequeñas, preferiblemente de puro algodón, para facilitar su cambio y lavado. Si es posible, prepare dos mantas infantiles, que se pueden aumentar o disminuir según cambie la temperatura. Debido a que la manta es delgada y cálida, también se puede usar cuando las madres alimentan a sus recién nacidos. Esto permite que las madres y los bebés tengan un contacto más cercano y logren la postura de alimentación correcta.
También es importante preparar la ropa de cama de tu recién nacido. El colchón de la cama pequeña no debe ser demasiado blando. Es mejor doblar la guata de algodón vieja para hacer un colchón y luego colocar una fina capa de guata de algodón encima. Porque los huesos de los recién nacidos son relativamente blandos y se encuentran en etapa de desarrollo y crecimiento. Si el colchón es demasiado blando, como el uso de un colchón de muelles blandos o una almohadilla de esponja, la columna del bebé a menudo estará curvada, lo que fácilmente puede causar deformación de la columna o incluso joroba, lo que no favorece las actividades del recién nacido y Afecta el desarrollo de huesos y músculos.
Las sábanas del recién nacido deben ser preferentemente de algodón, más grandes que la cuna, y se pueden colocar debajo del colchón para evitar que las sábanas se hagan una bola con el movimiento.
Antes de que el recién nacido sea dado de alta del hospital y regrese a casa, la ropa, ropa de cama y sábanas preparadas deben exponerse al sol durante unas 4 horas para su uso posterior. Lave y cambie la ropa de cama con frecuencia y séquela con frecuencia. Esto no solo hace que la ropa de cama sea suave y cálida, sino que también la desinfecta y esteriliza.