¿Puede la vitamina E inhibir el crecimiento tumoral? ¿Existe alguna base científica para esta afirmación?
Tiene cierto papel auxiliar en la prevención de tumores. Los tumores malignos se dividen en tumores benignos y malignos. Los tumores generalmente se denominan enfermedades cancerosas. El efecto de la vitamina E sobre el cáncer es reducir los carcinógenos del colesterol, mantener las células normales, inhibir la proliferación de células cancerosas, inducir a las células cancerosas a dividirse en células normales y mejorar la función inmune del cuerpo. La vitamina E es una vitamina liposoluble en ocho formas y es un antioxidante clave. La vitamina E contiene 8 compuestos orgánicos, a saber, tocoferoles alfa, beta, gamma y delta y tocoferoles alfa, beta, gamma y delta.
El alfa-tocoferol es la forma de vitamina E más abundante, colorida y energética en la naturaleza. La vitamina E tiene efectos antioxidantes, por lo que es estable al ácido y al calor, pero inestable a los álcalis. Si la sal de aluminio, la sal de plomo o el aceite vegetal se deterioran, acelerarán su oxidación y serán destruidos. Regula la adhesión y agregación plaquetaria: cuando falta vitamina E, mejora la agregación plaquetaria y la función de coagulación, y aumentan los factores de riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.
Los ingredientes que contienen vitamina E incluyen aceite comestible, frutos secos, judías, etc. Para la mayoría de las personas, la vitamina E obtenida de los alimentos es suficiente. Por lo tanto, en circunstancias normales, las personas sanas no necesitan complementar la vitamina E. La deficiencia de vitamina E puede ocurrir en bebés prematuros con bajo peso al nacer, baja concentración de proteína B en sangre y pacientes con trastornos de absorción de grasas. Estas personas deben considerar tomar suplementos de vitamina E de manera adecuada.