¿Qué medicamento antipirético es mejor?

Las fiebres altas repetidas son algo a tener en cuenta. Las principales causas de recurrencia general son: inflamación crónica y enfermedades del sistema sanguíneo. La inflamación crónica es común en episodios agudos de amigdalitis crónica. Se repetirán amigdalitis, faringitis y baja inmunidad. Es causada principalmente por amigdalitis aguda que no se cura por completo. Durante el examen, se puede ver que las amígdalas y los arcos palatinos están en un estado de congestión crónica, y se pueden ver tapones de pus viejos en forma de varilla de color amarillo-blanco. la boca de la cripta. Estos puntos o tapones de pus a veces van acompañados de presión con la lengua. Cuando la placa sale del extremo superior del arco palatino, solo se puede excluir de la abertura del receso. Las amígdalas están hipertróficas en diversos grados y se adhieren. tejidos circundantes. Se puede observar que su superficie es irregular. Las enfermedades transmitidas por la sangre son principalmente infecciones por protozoarios (eperitrozoidosis, toxoplasmosis, etc.) o envenenamiento de la sangre y bacteriemia.

Por lo tanto, ante los síntomas recurrentes de fiebre alta, se debe acudir al hospital a tiempo para determinar la causa principal.

En cuanto a los antipiréticos, los siguientes ingredientes se usan principalmente en clínica:

Los antipiréticos de uso común incluyen infusión intravenosa, inyección intramuscular, tabletas o soluciones orales e inyección transanal. Hay cuatro dosis en supositorios. formas, debiendo seleccionarse la más adecuada según la edad y condición del paciente.

Tomar antipiréticos orales. Esta es la clase de medicamento más comúnmente utilizada y más segura, incluido el ácido acetilsalicílico (aspirina) y el paracetamol (acetaminofén), y pueden tomarlo todas las edades, excepto las mujeres embarazadas.

Inyección intravenosa e intramuscular de fármacos. Es adecuado para pacientes en coma, que comen mal y no pueden cooperar con los medicamentos orales. Este tipo de medicamento actúa rápidamente, la temperatura corporal baja rápidamente y el paciente suda mucho. Al usarlo, preste atención a agregar suficiente agua. El método más sencillo es beber agua hervida o zumos de frutas y verduras. A quienes no puedan comer se les pueden dar infusiones, complementar con suero fisiológico, etc.

Los segundos antipiréticos más utilizados incluyen metamizol, ketoprofeno, fenbufeno, ibuprofeno, indometacina sódica, diclofenaco sódico, norfloxacino, ácido behénico y salicil imidazol, diflunisolante, celecoxib, vazocoxib, parecoxib, etoricoxib, etc.