¿Cómo ajustar la psicología de la vanidad?
Impulsadas por la vanidad, las personas suelen perseguir rostros bonitos, independientemente de las condiciones reales, y acaban causando daño. Bajo una fuerte vanidad, a veces se esconden motivos terribles que pueden traer consecuencias muy graves.
La vanidad está relacionada con las necesidades humanas. Las necesidades humanas se dividen en necesidades fisiológicas, necesidades de seguridad, necesidades de pertenencia y amor, necesidades de estima y necesidades de autorrealización. Entre ellas, las necesidades de estima incluyen la autosatisfacción con los logros, el poder, la autoridad, la reputación, el estatus y el prestigio. Las necesidades de una persona deben ser coherentes con su propia realidad, de lo contrario utilizará medios injustos para satisfacerlas. En ausencia de condiciones, surgirá la vanidad para satisfacer su autoestima. Por eso algunas personas dicen que la vanidad es una especie de autoestima distorsionada, lo cual tiene sentido.
La vanidad existe tanto en hombres como en mujeres, pero en general, las mujeres tienen una vanidad más fuerte que los hombres. Entonces la vanidad causa más dolor a las mujeres que a los hombres.
Representación
1. El comportamiento vanidoso en la vida material se manifiesta principalmente en la comparación patológica.
2. El comportamiento vanidoso en la vida social se manifiesta principalmente como una fanfarronería patológica.
3. El comportamiento de vanidad en la vida espiritual se manifiesta principalmente como celos patológicos.
Ajustarse para adaptarse
Ser respetuoso de uno mismo y establecer un concepto correcto del honor y la deshonra.
Para superar la vanidad, primero debemos respetarnos y amarnos a nosotros mismos. Como persona, al menos debes ser honesto y recto, y no debes cambiar tu personalidad por una satisfacción psicológica temporal. Sólo si comprendemos el respeto por nosotros mismos y tenemos una comprensión y una actitud correctas hacia el honor, el estatus, las ganancias y las pérdidas y el rostro, no podremos perder nuestra personalidad bajo la interferencia externa. Debes apreciar tu propia personalidad y defender una personalidad noble para evitar que surja la vanidad.
Establece ideales elevados
Una persona que persigue la verdad, la bondad y la belleza no se exhibirá por medios inadecuados y no existirá sólo de nombre. Al mismo tiempo, debemos ser capaces de evaluarnos correctamente, ver nuestras fortalezas y debilidades y siempre considerar la eliminación de las brechas para realizar nuestros ideales como la dirección principal de nuestros esfuerzos.
Tratar correctamente a la opinión pública y captar la escala de comparación en la vida.
La vanidad está relacionada con la autoestima, y la autoestima está estrechamente relacionada con la opinión pública circundante. La evaluación de los demás y las condiciones superiores no deben ser factores externos que afecten tu progreso. Sólo haciendo nuestro mejor esfuerzo podremos lograr nuestros objetivos. La mentalidad de comparación es común. Si comparas a los demás horizontalmente en función de valores sociales en lugar de valores personales, tu psicología nunca estará equilibrada y tu vanidad será más fuerte. Debes compararlo con tu pasado para ver si has progresado en todos los aspectos. Sólo si tienes confianza y eres autosuficiente podrás no dejarte llevar por la vanidad y convertirte en una persona noble.
Corrección autopsicológica de malas conductas de vanidad
Si un individuo ha tenido conductas patológicas como fanfarronear, mentir, celos, etc., puede utilizar el entrenamiento psicológico para corregirse. Este método se deriva del principio de refuerzo negativo de los reflejos condicionados. Es decir, cuando una conducta patológica está por aparecer o ya ha ocurrido, debes castigarte hasta cierto punto, como por ejemplo rebotarte con una goma elástica en la muñeca, para que sirva de advertencia e intervención. Con el tiempo, la vanidad se desvanecerá gradualmente, pero este método requiere mi perseverancia sobrehumana y mi firme convicción para lograr el efecto.