¿Se puede comer la crisálida del gusano de seda?

Las crisálidas de gusanos de seda son comestibles. Puede ser consumido por la población general y tiene los efectos de mejorar la inmunidad, retrasar el envejecimiento, reducir la grasa y el colesterol en sangre y proteger la función hepática.

Las pupas de gusanos de seda pueden producir sustancias farmacológicamente activas, que pueden aumentar eficazmente el nivel de glóbulos blancos humanos, mejorando así la función inmune humana y retrasando el envejecimiento funcional humano. Los ingredientes activos del aceite de crisálida de gusano de seda pueden reducir los lípidos y el colesterol en sangre y mejorar la función hepática. Pueden consumirlo personas con presión arterial alta, hiperlipidemia, hígado graso y diabetes. Las pupas de gusanos de seda son ricas en proteínas y varios aminoácidos. Se puede decir que es un complemento nutricional posparto para personas débiles, enfermas y discapacitadas. Aunque comer crisálida de gusano de seda tiene muchos beneficios, también debe prestar atención para asegurarse de que la crisálida de gusano de seda esté fresca y cocida, y no comer demasiado. Además, algunas personas tendrán picazón en la piel después de comer crisálidas de gusanos de seda. Esta es una reacción alérgica a las proteínas y deben ir al hospital a tiempo.