Historia del desarrollo de fármacos
Muchas de estas experiencias prácticas se han transmitido hasta nuestros días, como beber alcohol para aliviar el dolor, ruibarbo para provocar diarrea, neem para eliminar insectos, corteza de sauce para reducir la fiebre, etc.
Más tarde, las drogas también se desarrollaron en la lucha entre la superstición religiosa y el mal, y en la búsqueda del placer y la longevidad por parte de los emperadores feudales.
Pero más aún es la acumulación y difusión de la experiencia práctica de la medicina popular en la medicina herbaria, que se ha registrado en China, Egipto, Grecia, India, etc. Por ejemplo, alrededor del siglo I d. C., el Herbal Classic de Shen Nong de China, la escritura cursiva de Ebers de Egipto, etc.
Compendio de Materia Médica (1596) escrito por Li Shizhen en la dinastía Ming hizo grandes contribuciones a la historia del desarrollo de fármacos y es una obra clásica de la medicina tradicional china. El libro tiene 52 volúmenes, alrededor de 6.543.809 palabras, incluidos 1.892 tipos de medicamentos, 1.160 cuadros de ilustraciones y 660 recetas.
Después del Renacimiento en Europa Occidental (comenzando en el siglo XIV), el pensamiento de la gente comenzó a liberarse de las cadenas de la religión, creyendo que todo tiene una causa y puede entenderse siempre que se observe objetivamente. .
El médico suizo Paracelso (1493-1541) criticó la teoría idealista del antiguo médico griego Galeno, poniendo fin a la Edad Media en la historia de la medicina durante más de 1.500 años.
Más tarde, el anatomista británico W. Harvey (1578-1657) descubrió la circulación sanguínea y creó una nueva era de farmacología experimental.
El fisiólogo italiano F. Fontana (1720-1805) probó la toxicidad de más de mil tipos de fármacos mediante experimentos con animales y llegó a una conclusión objetiva: todos los fármacos naturales tienen sus principios activos sobre una base determinada. determinada parte del cuerpo sexualmente, provocando una reacción típica.
Esta conclusión fue confirmada más tarde por el químico alemán F.W. Sertuna (1783-1841), quien fue el primero en aislar y purificar la morfina a partir de la adormidera.
A finales del siglo XVIII se inició la Revolución Industrial británica, que no sólo impulsó la producción industrial sino que también impulsó el desarrollo de las ciencias naturales.
Entre ellos, el desarrollo de la química orgánica proporciona la base material para la farmacología. Los principios activos de las plantas medicinales se purifican continuamente para obtener fármacos de alta pureza, como ipecacina, quinina, estricnina, cocaína, etc.
Posteriormente se sintetizaron nuevos fármacos de forma artificial. Por ejemplo, el microbiólogo alemán P. Ehrlich identificó una nueva arsina eficaz para tratar la sífilis a partir de casi mil compuestos orgánicos de arsénico (914).
La farmacología como disciplina independiente debe contarse desde el alemán R. Buchheim (1820-1879), quien fundó el primer laboratorio de farmacología y escribió el primer libro de texto de farmacología y fue el primer profesor de farmacología del mundo.
Su alumno O. Schmied Berg (1838-1921) continuó desarrollando la farmacología experimental y comenzó a estudiar los lugares de acción de los fármacos, lo que se denomina farmacología de órganos.
Los receptores fueron originalmente una teoría de la acción de los fármacos propuesta por el fisiólogo británico J. N. Langley (1852-1925), y ahora se ha demostrado que son el mecanismo de acción clave para muchos fármacos específicos. Desde entonces, la farmacología ha avanzado a pasos agigantados. Después del final de la Segunda Guerra Mundial, aparecieron muchos nuevos campos farmacológicos y nuevos medicamentos sin precedentes, como antibióticos, medicamentos contra el cáncer, antipsicóticos, antihipertensivos, antihistamínicos, etc.
En los últimos años, el desarrollo de la farmacocinética ha permitido que el uso clínico de los medicamentos pase de la experiencia al cálculo científico, impulsando el desarrollo de la biofarmacéutica.
La farmacodinámica ha ido penetrando gradualmente en el mundo microscópico, dilucidando los mecanismos moleculares de muchos fármacos y promoviendo el desarrollo de la propia biología molecular.
De cara al futuro, la farmacología se centrará en las causas fundamentales de las enfermedades y desarrollará tratamientos farmacológicos dirigidos a las causas, logrando así aún más los efectos de los tratamientos farmacológicos.
La farmacogenética es una ciencia emergente, desarrollada con el desarrollo de la teoría de genes y receptores, y también es una ciencia marginal.
En la práctica clínica, a menudo se puede encontrar que el mismo fármaco y la misma dosis son eficaces para el paciente A, pero ineficaces para el paciente B, y pueden tener efectos secundarios para el paciente C.
En farmacología, generalmente se informa que los fármacos actúan sobre los receptores, teniendo por tanto ciertos efectos farmacológicos y ciertos efectos terapéuticos.
La diferencia entre ambos, o las diferencias individuales entre los pacientes, deben explicarse mediante genes. Éste es el problema que debe resolver la farmacología genética. La idea básica de la farmacogenética es que las diferentes respuestas de los pacientes al mismo fármaco son causadas por genes que difieren entre ellos.
La farmacogenética es una revolución en el desarrollo de fármacos y la aplicación clínica del futuro, de la que se pueden derivar diversos agentes de diagnóstico, fármacos terapéuticos, diferentes especificaciones de dosificación terapéutica y diferentes formas de dosificación.
En primer lugar, los fabricantes de reactivos de diagnóstico desarrollarán más kits de diagnóstico para diagnosticar las condiciones genéticas de los pacientes.
Por supuesto, actualmente los agentes de diagnóstico solo se utilizan para diagnosticar enfermedades, pero los agentes de diagnóstico utilizados para diagnosticar genes definitivamente tendrán un mercado más amplio en el futuro.
Estos genes pueden denominarse genes de respuesta a fármacos.