Red de conocimientos sobre prescripción popular - Enciclopedia de Medicina Tradicional China - ¿Cuál es la relación entre las caries y la enfermedad periodontal?

¿Cuál es la relación entre las caries y la enfermedad periodontal?

Las caries y la periodontitis son enfermedades bucales comunes. ¿Cuál es la relación entre ellos?

La caries y la enfermedad periodontal progresan a ritmos diferentes para cada individuo, lo cual es injusto. Por ejemplo, la aparición de caries está relacionada con muchos factores, como la ingesta de azúcar y los métodos de ingesta, incluidos los factores de tiempo. Lo mismo ocurre con la enfermedad periodontal, que está relacionada con factores como el tabaquismo y el estrés excesivo. Es ampliamente conocida como una enfermedad representativa de las enfermedades del estilo de vida.

Es bien sabido que la baja inmunidad provocada por la diabetes acelerará el desarrollo de la enfermedad periodontal y la caries. Además, la baja inmunidad causada por el exceso de trabajo y la falta de sueño también puede empeorar la enfermedad. Está estrechamente relacionado no sólo con diferencias en la saliva y los componentes sanguíneos, sino también con factores genéticos. Cuanto más se difunde esta narrativa, más difícil resulta encontrar una solución.

Cuantas más teorías tengas, más cuidado deberás tener. En el pasado, la tuberculosis se ha convertido en una enfermedad habitual debido a los cambios en el entorno laboral y de vida. Sin embargo, con el descubrimiento de la tuberculosis y el desarrollo de medicamentos que actúan contra ella, los temas relacionados con ella ya no se discuten. La gente también espera que las caries y la enfermedad periodontal, dos enfermedades diferentes a la tuberculosis, se resuelvan por completo.

Las enfermedades habituales se refieren a grupos de enfermedades cuya aparición y desarrollo están relacionados con los hábitos alimentarios, de ejercicio, de ocio, de fumar y de beber de las personas. Las enfermedades representativas incluyen caries, enfermedad periodontal, osteoporosis, enfermedad hepática alcohólica, obesidad, gota (hiperuricemia), diabetes, hiperlipidemia, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, cáncer, etc.