Cómo cultivar bien el aloe vera

De la siguiente manera:

1. El aloe vera es una planta de semisombra y se puede mantener en interior con luz intensa y luz difusa durante mucho tiempo. Si se coloca a la luz solar directa, toda la planta se volverá amarilla y se curvará. Existe el riesgo de morir quemado por el sol en verano y morir congelado en invierno, por lo que el aloe vera no debe cultivarse al aire libre.

2. No regar demasiado. El aloe vera es muy tolerante a la sequía. Sus tallos y hojas carnosos son ricos en agua y pueden sobrevivir en condiciones de sequía durante largos períodos de tiempo. La pudrición de la raíz y de toda la planta provocada por el exceso de riego son las principales causas de muerte del aloe vera. El suelo está demasiado húmedo y puede haber pudrición de las raíces. El síntoma es que el aloe vera comienza a volverse amarillo lentamente desde las raíces y pierde la sensación verde original. Se puede salvar trasplantándolo y secándolo a tiempo. Puedes regarla cada 15 días aproximadamente en primavera, verano y otoño. En invierno, está bien regarla una vez al mes. Si notas que la tierra de la maceta está muy seca, vuelve a regarla.

3. El aloe vera es una variedad que puede explotar los cogollos laterales. El aloe vera que crece vigorosamente brotará densos cogollos laterales de sus raíces en primavera y otoño. Puedes dividir las plantas en macetas separadas para una propagación más rápida. No tengo la costumbre de fertilizar aloe vera, pero aplicar un poco de fertilizante diluido durante el período de crecimiento es más propicio para hacer estallar los cogollos laterales y hacer que las hojas se vuelvan espesas, verdes y brillantes.

4. El aloe tiene miedo al frío. La temperatura de invierno debe mantenerse por encima de los 5 grados y la tierra de la maceta debe mantenerse seca.

5. El aloe vera no requiere mucho suelo, pero si se cultiva en el interior de casa, las condiciones de ventilación pueden ser ligeramente deficientes, por lo que es mejor utilizar suelo suelto y transpirable. Puede agregar un poco de ceniza, partículas grandes de arena de río, cáscaras de huevo, etc. al moho de las hojas como agente aflojante.