Recetas para una lengua sin saburra

Los cambios en la capa de la lengua de su bebé pueden ser un signo de disfunción del tracto digestivo, calor interno, acumulación de alimentos y otros problemas. Los padres pueden aliviar las molestias y mejorar la inmunidad de su bebé mediante ajustes en la dieta y tratamientos quiroprácticos.

Disfunción del tracto digestivo

Cuando la lengua del bebé es de color blanco pálido, e incluso parte de la saburra de la lengua se cae, formando una zona lisa con protuberancias a su alrededor, que irá acompañada de cada comida Sensación de malestar. Los padres pueden ajustar su dieta, elegir frutas y verduras ligeras y frescas y reducir los alimentos fritos y ricos en grasas. Cocine gachas de calabaza y ñame para su bebé, que son deliciosas y ayudan a la motilidad gastrointestinal y la digestión.

Resfriados y fiebres recurrentes

Los padres deben prestar atención cuando la lengua del bebé está suave y sin recubrimiento, como un espejo, acompañado de resfriados o fiebres recurrentes. Prepare rodajas de rábano blanco y gachas de arroz fáciles de digerir para su bebé y agregue azúcar morena para aumentar el dulzor. Esta dieta ayuda a aliviar las molestias y fortalecer la inmunidad de su bebé.

Provocado por el calor interno

Cuando un bebé tiene menos saburra en la lengua, su lengua estará roja, tendrá la boca seca y tendrá un olor peculiar, será propenso a resfriados y fiebres, y sus heces estarán secas, lo que se debe principalmente al calor interno. Los padres deben enfriar físicamente al bebé, beber más agua, evitar los alimentos grasosos y proporcionarle sopas dulces como agua azucarada y peras guisadas con azúcar de roca. Si su temperatura continúa aumentando, busque atención médica de inmediato.

Indigestión

Si la lengua de tu bebé está cubierta de una capa amarilla y pegajosa y hay un olor peculiar en la boca, es probable que sea un síntoma de acumulación de comida. Comer en exceso o alimentos grasos puede causar este problema. En este momento, el agua de espino o las gachas de ñame son buenas opciones, que ayudan a la digestión y la acumulación.

Tratamiento quiropráctico

Además de los ajustes dietéticos, los padres también pueden probar el tratamiento quiropráctico: dejar que el bebé esté boca abajo, comenzar con dos dedos a lo largo de ambos lados de la columna y pellizcar desde abajo. arriba Para la piel del bebé, repita 50 veces desde el sacrococcíge hasta el punto Dazhui en la columna cervical. Esto no sólo promoverá la función digestiva de su bebé, sino que también mejorará la inmunidad.