Cómo conservar la mantequilla de huevo
Envuélvelo en papel de aluminio o papel engrasado, sepáralo de los alimentos con olores fuertes y guárdalo en el frigorífico. El papel de aluminio evita que la mantequilla se oxide y se eche a perder con la luz y el aire. Si quieres usar mantequilla, córtala en un trozo y guarda el resto en el frigorífico.
Intenta no congelar y ablandar la mantequilla repetidamente, ya que esto reducirá su vida útil. Si la mantequilla que compras viene en grumos, sostenla en tus manos sin tocarla y guárdala en un cajón para verduras. Si es líquido, semilíquido, semisólido o turbio se puede almacenar a temperatura ambiente. Por supuesto, también se puede guardar en un cajón para verduras.
El papel de la mantequilla de huevo
La mantequilla de huevo es un aceite extraído de la yema de los huevos, también conocido como aceite de gallina, aceite de fénix, etc. Este es un gran remedio para quemaduras menores. Esto se debe a que la yema de huevo es rica en vitaminas A, D y lecitina, que desempeña un papel importante en la regeneración y el metabolismo de la piel y tiene un buen efecto en el tratamiento de quemaduras.
Aplicaciones clínicas en medicina interna como enfermedades coronarias, palpitaciones del corazón, tuberculosis, úlcera gástrica, tos ferina en niños, desnutrición y diarrea en niños.
La mantequilla de huevo trata las úlceras bucales en los niños.
La manteca de huevo tiene el efecto de reducir los lípidos en sangre.
El contenido anterior se refiere a la Enciclopedia Baidu: Mantequilla de huevo.