El daño de la anfetamina
La información proviene de la prestigiosa revista médica "The Lancet" sobre la comparación de la nocividad y la adicción de las drogas controladas comunes, incluidos el tabaco y el alcohol. Si deja de usarlo después de un uso prolongado, no podrá sentir ninguna felicidad. En caso de caries grave, las anfetaminas pueden alterar la producción de saliva. Los síntomas de intoxicación incluyen locuacidad, dolor de cabeza, confusión, fiebre alta, aumento de la presión arterial, sudores nocturnos, pupilas dilatadas y pérdida de apetito. El uso en grandes dosis puede causar locura, trastornos del pensamiento, similares a la esquizofrenia delirante (esquizofrenia), paranoia, alucinaciones auditivas, delirios de persecución, etc. El uso prolongado puede provocar un síndrome cerebral orgánico. Existe riesgo de hipertensión arterial y accidente cerebrovascular. Los síntomas de abstinencia después de la interrupción incluyen lentitud mental, letargo, irritabilidad, inquietud, depresión y tendencias suicidas.