Seis formas sencillas de solucionar los problemas de la piel de tu bebé
Limpieza suave
Limpie suavemente la piel de su bebé con agua tibia y un jabón suave para platos para bebés, evitando ingredientes irritantes que puedan agravar la piel seca y agrietada.
Limpiar moderadamente
Reducir el número de baños y evitar una limpieza excesiva que resecará la piel. 65438 0-2 veces por semana es suficiente. La temperatura del agua del baño no debe ser demasiado alta y el tiempo de baño no debe ser demasiado largo.
Aumenta la humedad
Aplica una crema o loción hidratante adecuada para tu bebé. Elige un producto libre de fragancias e irritantes. No olvides aplicarlo cada vez. cambiar un pañal. Mantener la piel hidratada puede ayudar a reducir la sequedad y la piel agrietada.
Controla la temperatura
Asegúrate de que el entorno del bebé esté a una temperatura adecuada. El sobrecalentamiento y el enfriamiento pueden provocar una piel más seca. Preste atención a la ventilación interior para evitar que el ambiente esté demasiado seco.
Bebe más agua
Después de que el bebé empiece a complementar la alimentación, se le debe dar abundante agua para mantener su cuerpo y su piel hidratados. La cantidad adecuada de agua ayuda a hidratar la piel y reducir la sequedad y la piel agrietada.
Reduce la fricción y la irritación
Elige ropa y pañales suaves y cómodos para evitar tejidos ásperos que irriten la piel de tu bebé. Trate de evitar usar ropa demasiado ajustada o demasiado gruesa para evitar agravar la piel seca y agrietada.