¿Por qué hay tanta gente bebiendo vino tinto?
El vino tinto puede estimular el apetito.
El color brillante y el cuerpo claro y transparente del vino son agradables a la vista cuando se vierte en la copa, el aroma afrutado y el aroma del vino llegan a las fosas nasales al probar, los taninos del vino son leves; astringente, que estimula el apetito.
El sabor y composición únicos del vino lo convierten en el acompañamiento alimentario más adecuado. No sólo estimula el apetito, ayuda a la digestión, mejora la calidad de las comidas, sino que también entusiasma y relaja a las personas.
2. El vino tinto tiene un efecto nutritivo.
Las materias primas naturales y el proceso de elaboración del vino hacen que éste contenga una variedad de aminoácidos, minerales y vitaminas, que son nutrientes que el cuerpo humano debe complementar y absorber. No requiere predigestión y puede ser absorbido directamente por el organismo.
3. El vino tinto ayuda a la digestión.
En el estómago, 60-100 g de vino pueden aumentar la producción de jugo gástrico normal en 120 ml (que contiene 1 g de ácido clorhídrico libre). El vino es beneficioso para la asimilación de proteínas; los taninos del vino tinto pueden aumentar la contractilidad de las fibras musculares lisas de la musculatura intestinal. Por tanto, el vino puede regular la función del colon y tiene cierto efecto sobre la colitis.
El vino blanco dulce contiene sorbato potásico, que ayuda a la secreción de bilis y páncreas. Por tanto, el vino puede ayudar a la digestión y prevenir el estreñimiento.
4. El vino tinto tiene efectos de belleza.
El vino contiene polifenoles y otros compuestos orgánicos, que le permiten reducir los lípidos en sangre, inhibir el colesterol malo, suavizar los vasos sanguíneos y mejorar la función cardiovascular y la actividad cardíaca. También tiene efectos de belleza y antienvejecimiento.
5. El vino tinto puede ayudarte a perder peso.
El alcohol puede ayudarte a perder peso. Cada litro de vino seco contiene 525 calorías, lo que representa sólo 65.438+0/65.438+05 del requerimiento calórico diario promedio del cuerpo humano.
Después de beber alcohol, el cuerpo humano puede absorberlo y digerirlo directamente, y se consumirá por completo en 4 horas sin aumentar de peso.
Así, las personas que beben vino seco con frecuencia no solo pueden reponer el agua y diversos nutrientes que necesita el cuerpo humano, sino que también ayudan a perder peso.
6. El vino tinto puede inhibir la absorción de grasas.
Los científicos japoneses descubrieron que el vino tinto puede inhibir la absorción de grasas y algunos ratones realizaron experimentos. Después de beber vino durante un período de tiempo, los ratones descubrieron que su absorción intestinal de grasas se ralentizaba y los ensayos clínicos en humanos llegaron a la misma conclusión.