¿Cómo cuidar a un niño enfermo?

Las madres no deben entrar en pánico cuando sus hijos están enfermos. Sólo deben prestar atención a los siguientes puntos para cuidar bien de sus hijos.

1. No restringir las actividades de los niños. No asuma que su hijo debe permanecer en cama cuando esté enfermo a menos que el médico lo considere necesario. Muchos niños enfermos simplemente necesitan dormir un poco más de lo habitual.

2. El niño puede perder el apetito cuando está enfermo. En este momento, déjelo beber más agua y proporciónele pequeñas cantidades de comida de colores brillantes. No lo obligues a comer.

Muchos padres temen que sus hijos enfermos se resfríen. De hecho, si tiene fiebre, es más importante mantener el ambiente fresco y el aire fresco. Lo mejor es mantener la temperatura ambiente a 265438±0 ℃.

Un niño enfermo tiene dificultades para concentrarse y siempre necesita la compañía de los demás. En este momento, es el que más necesita el abrazo de su madre, porque puede sentirse incómodo y asustado. Si está muy ocupado, puede dejar que su hijo mire televisión o le ponga cuentos grabados, pero trate de dedicarle tiempo en persona. Además, cuando un niño está enfermo, a menudo regresa a las cosas con las que solía jugar. También le puede gustar cortar papel, colorear, pegar, construir bloques, etc.

Cuando un niño está enfermo, debemos intentar reducir la carga de las tareas domésticas para poder liberar más tiempo y energía para cuidar del niño. Si tu hijo está gravemente enfermo, lo mejor es dormir en la misma habitación que él para poder estar cerca para cuidarlo de vez en cuando. Los artículos necesarios, como toallas de papel, agua y medicamentos, deben guardarse en lugares convenientes.

6. Si un niño está gravemente enfermo, después de recuperarse, es posible que todavía esté particularmente emocional, tenga problemas para concentrarse, tenga problemas para dormir y no pueda controlar sus deposiciones. Estos son fenómenos normales y mejorarán gradualmente, por lo que los padres deben consolarlo con cuidado. Pero lo más importante es darle a su hijo una dieta equilibrada, dormir lo suficiente y mucho aire fresco.