¿Cómo determinar si tienes pólipos nasales?

Los pólipos nasales son una enfermedad común entre los pacientes de otorrinolaringología. Son bultos que sobresalen en la membrana mucosa de la cavidad nasal o los senos nasales. Suelen aparecer en las paredes laterales de la cavidad nasal y en la punta de la nariz. Las causas de la enfermedad son complejas y están relacionadas con estimulación inflamatoria, reacciones alérgicas, infecciones por hongos, disminución de la resistencia del cuerpo, genética y otros factores.

Los pólipos nasales no son verdaderos tumores, sino que suelen ser el resultado de reacciones alérgicas y edema de la mucosa nasal provocados por la inflamación crónica de los senos nasales. Si los pólipos nasales no se detectan durante mucho tiempo y no se tratan, se producirán los siguientes síntomas.

1. Congestión nasal A medida que aumenta el tamaño de los pólipos nasales, la congestión nasal seguirá empeorando y el sentido del olfato se volverá insensible e incapaz de oler.

2. Secreción nasal intensa, acompañada de picazón nasal, estornudos, ruidos nasales obstructivos, ronquidos durante el sueño y respiración bucal.

3. Combinado con la sinusitis, habrá dolor distendente o dolor de cabeza en la nariz, los oídos y la cara, y el dolor de cabeza empeorará después de bajar la cabeza.

4. Durante el proceso de endoscopia, se pueden observar nuevos organismos "parecidos al lichi" en la cavidad nasal, que son de color blanco o rosado.

Si presentas los síntomas anteriores puedes acudir al departamento de otorrinolaringología para recibir tratamiento. El diagnóstico se puede realizar mediante un examen ambulatorio y se debe realizar una tomografía computarizada para comprender el alcance de la enfermedad.

El tratamiento consiste principalmente en resección quirúrgica y tratamiento de la causa. El principal problema de la cirugía es la recurrencia. Sin embargo, desde la década de 1990, la introducción de la tecnología de endoscopia nasal ha brindado un nuevo espacio para el tratamiento de los pólipos nasales, reduciendo en gran medida la tasa de recurrencia posoperatoria.

En pacientes con recurrencia se puede considerar la apertura del seno etmoidal o la cirugía radical. Se debe enfatizar que el seguimiento posoperatorio y la medicación tienen una importancia positiva para prevenir la recurrencia.

Para la prevención de los pólipos nasales, todo el mundo debe prestar atención a prevenir y tratar activamente diversas enfermedades nasales crónicas, como epistaxis, senos nasales, etc., para prevenir los pólipos metaplásicos.

Mejorar la nutrición corporal: Trate de elegir alimentos nutritivos y aumentar la ingesta de proteínas y vitaminas. Una dieta razonable puede mejorar la resistencia a las enfermedades del paciente y ayudar con el tratamiento de los pólipos nasales.

Desarrolla buenos hábitos de trabajo y descanso: descansa más, evita el esfuerzo excesivo y no te quedes despierto hasta tarde. Quedarse despierto hasta tarde con frecuencia reducirá la inmunidad del cuerpo y agravará la condición del paciente. Desarrollar buenos hábitos de trabajo y descanso ayudará a tratar la enfermedad y controlar eficazmente el desarrollo de la condición del paciente.

Coma más verduras y frutas de hojas verdes: Es bueno que los pacientes con pólipos nasales coman más verduras de hojas verdes. El consumo regular de verduras de hojas verdes puede mejorar la condición física, eliminar sustancias nocivas del cuerpo humano, mejorar la inmunidad del paciente y mejorar la resistencia a las enfermedades.