¿Qué medicamento se necesita para tratar la cirrosis hepática crónica?
Guía de Salud:
1. Prevención activa: La cirrosis hepática es el resultado de la degeneración paulatina del parénquima hepático provocada por diferentes motivos.
Debemos prestar atención a la prevención y el tratamiento de diversas enfermedades primarias, prevenir y tratar activamente la hepatitis crónica, la esquistosomiasis y las infecciones gastrointestinales, evitar el contacto y el uso de sustancias tóxicas para el hígado y reducir los factores patógenos.
2. Estabilidad emocional: El hígado tiene una relación muy estrecha con el espíritu y la emoción. El mal humor, la depresión y la ira pueden afectar la función del hígado y acelerar la progresión de la enfermedad. Establecer una voluntad fuerte, un estado de ánimo feliz, un ánimo elevado y eliminar la carga mental contribuirá a mejorar la condición.
3. Combinación de movimiento y quietud: Los pacientes con cirrosis hepática cuya función compensatoria ha disminuido, ascitis o infección deben guardar reposo en cama. Durante el período en el que la función compensatoria es suficiente y la condición es estable, se pueden realizar algunos trabajos ligeros o actividades apropiadas, y realizar ejercicios físicos beneficiosos, como caminar, hacer ejercicios, Tai Chi, Qigong, etc. La cantidad de actividad es tal que no me siento cansado.
4. Uso de drogas simples: el abuso ciego de drogas generales aumentará la carga sobre el hígado y no favorece la recuperación del hígado. Los fármacos nocivos para el hígado, como la isoniazida y los barbitúricos, deben utilizarse con precaución o tener contraindicaciones.
5. Deje de fumar y evite el alcohol: El alcohol puede alimentar el fuego y la sangre. El consumo prolongado, especialmente el alcohol fuerte, puede provocar cirrosis alcohólica. Por lo tanto, beber alcohol agravará la condición de los pacientes con cirrosis hepática y provocará fácilmente hemorragias. Fumar a largo plazo no favorece la estabilidad y la recuperación de la enfermedad hepática, puede acelerar el proceso de cirrosis y puede promover el cáncer de hígado.
6. Cuidados de la dieta: Es adecuada una dieta baja en grasas, alta en proteínas, rica en vitaminas y fácil de digerir. Debe haber regularidad, cantidad y moderación. En la etapa inicial, se pueden comer más productos de soja, frutas, verduras frescas y cantidades adecuadas de azúcar, huevos, pescado y carne magra; cuando la función hepática disminuye significativamente y hay signos de coma hepático, la ingesta de proteínas debe controlarse adecuadamente; y se debe recomendar una dieta baja en sal o sin sal. La ingesta diaria de sal no debe exceder de 1 a 1,5 g y la cantidad de agua consumida debe estar dentro de los 2000 ml. En la ascitis grave, la ingesta de sal debe controlarse dentro de 500 mg y la ingesta de agua debe estar dentro de 1000 ml. Se deben evitar los alimentos picantes e irritantes, los alimentos duros y fríos y los alimentos sobrecalentados para prevenir el sangrado.
La cirrosis es una enfermedad hepática crónica progresiva causada por una variedad de factores que dañan el hígado, como la hepatitis crónica activa y el alcoholismo a largo plazo. Los principales síntomas incluyen pérdida de apetito, fatiga, sangrado de encías, hígado palmas, arañas nevus, ictericia, niveles bajos de albúmina, esplenomegalia, várices abdominales, várices esofágicas y gástricas, ascitis, etc. En la etapa tardía a menudo ocurren complicaciones graves como hemorragia gastrointestinal, coma hepático e infección secundaria. Los pacientes con cirrosis también tienen un alto riesgo de sufrir cáncer primario de hígado y deben prestar atención a exámenes periódicos.
La cirrosis hepática se puede tratar con la medicina china y occidental, que tiene ciertos efectos.
Prescripción
1. Los pacientes con cirrosis hepática deben prestar atención al descanso y evitar el ejercicio extenuante; debemos mantener un estado de ánimo optimista y generar confianza para vencer la enfermedad.
2. Los alimentos utilizados deben ser de fácil digestión y nutritivos. Alto contenido de proteínas, alto contenido de azúcar, alto contenido de vitaminas y bajo en grasas son los principios para que los pacientes con cirrosis hepática elijan una dieta.
3. Cuando hay ascitis, descansar en cama, aumentar la nutrición y limitar el consumo de sal. Lo mejor es adoptar una dieta sin sal o baja en sal, con un contenido diario de sal que no supere los 5 gramos (1 yuan).
4. Cuando la ascitis es evidente, se debe limitar la ingesta de agua. Generalmente se debe controlar la ingesta diaria de agua en 1000 ml (equivalente a 2 botellas de agua salada utilizadas en los hospitales). La hiponatremia grave debe limitarse a 500 ml.
5. Las personas con várices esofágicas deben evitar alimentos irritantes y duros para evitar dañar las várices esofágicas y provocar sangrado abundante.
6. Cuando existe posibilidad de coma hepático se debe limitar la ingesta de proteínas y las tres comidas deben basarse en verduras.
7. Dejar de fumar y beber, y no abusar de medicamentos "protectores del hígado".
8. Debes acudir al hospital periódicamente para realizarte exámenes de función hepática, alfafetoproteína y ecografías.