Tratamiento de la sacroileítis

1. Promover el conocimiento sobre la prevención de enfermedades y proteger las articulaciones: primero, permitir que los pacientes comprendan la afección, realicen ejercicios físicos paso a paso, eviten el movimiento excesivo de las articulaciones y la carga de peso, y eviten daños mecánicos a las articulaciones. Los casos graves deben inmovilizarse o colocarse yesos para evitar deformidades. Para perder peso, utilice mangos y muletas para reducir la carga sobre las articulaciones afectadas. Aquellos que están relacionados con su carrera deberían cambiar de trabajo. El ejercicio de grupos de músculos relevantes puede mantener y mejorar la movilidad de las articulaciones y mejorar la estabilidad de las articulaciones.

2. Métodos farmacológicos Cuando se experimenta dolor, se puede utilizar aspirina, indometacina, ibuprofeno y otros analgésicos, no utilizarlos durante mucho tiempo para evitar que se forme dependencia o se reduzca el efecto. Si se trata de un punto sensible local, puede inyectar 1 ml de acetato de prednisolona o acetato de hidrocortisona, más 1 procaína de 5 a 10 ml como punto de dolor, una vez cada 5 a 7 días y de 3 a 4 veces como tratamiento. También existen medicinas tradicionales chinas y se recomienda no elegir la cirugía a la ligera.

3. Fisioterapia: terapia de calor, hidroterapia, rayos infrarrojos, onda ultracorta, estimulación eléctrica, etc. Puede mejorar la circulación sanguínea local, aliviar la tensión muscular y aliviar el dolor y otros síntomas. La terapia de tracción tiene un buen efecto en pacientes con radiculopatía espondilótica cervical. Puede relajar los músculos, aliviar el dolor y prevenir la adhesión de los tejidos adyacentes de las raíces nerviosas. Sin embargo, debe realizarse bajo la supervisión de un especialista.