Tratamiento de la sacroileítis
2. Métodos farmacológicos Cuando se experimenta dolor, se puede utilizar aspirina, indometacina, ibuprofeno y otros analgésicos, no utilizarlos durante mucho tiempo para evitar que se forme dependencia o se reduzca el efecto. Si se trata de un punto sensible local, puede inyectar 1 ml de acetato de prednisolona o acetato de hidrocortisona, más 1 procaína de 5 a 10 ml como punto de dolor, una vez cada 5 a 7 días y de 3 a 4 veces como tratamiento. También existen medicinas tradicionales chinas y se recomienda no elegir la cirugía a la ligera.
3. Fisioterapia: terapia de calor, hidroterapia, rayos infrarrojos, onda ultracorta, estimulación eléctrica, etc. Puede mejorar la circulación sanguínea local, aliviar la tensión muscular y aliviar el dolor y otros síntomas. La terapia de tracción tiene un buen efecto en pacientes con radiculopatía espondilótica cervical. Puede relajar los músculos, aliviar el dolor y prevenir la adhesión de los tejidos adyacentes de las raíces nerviosas. Sin embargo, debe realizarse bajo la supervisión de un especialista.