Principios básicos del refuerzo positivo

El principio básico del refuerzo positivo es la teoría del conductismo. La teoría del conductismo cree que el comportamiento humano y animal se aprende y es el resultado del refuerzo de los resultados conductuales. Si desea establecer o mantener un determinado comportamiento, puede proporcionar estimulación positiva al comportamiento, es decir, las recompensas pueden fortalecer el comportamiento, promoviendo así la aparición y frecuencia del comportamiento, y el comportamiento puede generarse o cambiarse. Este es el principio básico del refuerzo positivo.

El refuerzo positivo es una técnica de tratamiento o método de corrección para establecer y entrenar determinadas buenas conductas. También se denomina “refuerzo positivo” o “refuerzo positivo”. Promover la generación de conductas objetivo recompensando rápidamente las conductas objetivo e ignorando o restando importancia a las conductas anormales. Siempre que los procedimientos de refuerzo positivo se organicen adecuadamente durante la consulta, el cliente generalmente podrá alcanzar el objetivo deseado lentamente. Por tanto, este método es adecuado para solicitantes de ayuda que tienen trastornos de conducta y quieren cambiar su comportamiento.

Antes de realizar una intervención conductual, primero se debe comprender la situación básica de la persona que busca ayuda y comprender los motivos del problema. Luego identificar los principales síntomas de conducta desadaptativa o anormal que requieren intervención por parte del buscador, es decir, la conducta objetivo. Las conductas objetivo establecidas deben ser objetivamente mensurables y analizables y susceptibles de refuerzo repetido. Cuanto más específica sea la conducta objetivo seleccionada, mejor será difícil de operar si la conducta objetivo no es específica o carece de medios y métodos de evaluación. Por ejemplo, si los padres esperan que sus hijos desarrollen el hábito de leer y los niños están dispuestos a trabajar duro para lograrlo, la conducta observable y evaluable de la lectura se convierte en la conducta objetivo.