Almacenamiento de grasa visceral 1 azúcar 2 alto, ¡3 peligros importantes! La obesidad no es voluntaria, puede deberse a la falta de este gen.
Nuestro cuerpo segrega una hormona llamada adiponectina. La adiponectina es una de las “hormonas adelgazantes” y también se encarga de reparar los vasos sanguíneos dañados, ayudar al funcionamiento de la insulina y controlar el azúcar en sangre. Pero una vez que aumenta la grasa visceral, las células reducirán la secreción de adiponectina, reduciendo la acción y eficacia de la insulina.
Además, existe una sustancia llamada “TNF-α (factor de necrosis tumoral)”, que originalmente es un factor que puede provocar la muerte de las células tumorales y mejorar la inmunidad humana. Pero cuando aumenta la grasa visceral, el TNF-α necesita consumir mucha energía para atacar las células malignas del cuerpo, provocando que falle la insulina. Es decir, a medida que aumenta la grasa visceral, también aumenta el riesgo de diabetes.
Pero la cantidad de adiponectina que pueden secretar las células grasas depende no sólo de la acumulación de grasa visceral, sino también de factores genéticos.
Tomemos Japón como ejemplo. Se dice que los japoneses de 40 años nacen con un gen que les impide secretar grandes cantidades de adiponectina. En comparación con las personas que pueden secretar grandes cantidades de adiponectina, sólo pueden producir alrededor de dos tercios. Además, se dice que la secreción de insulina de los asiáticos es sólo entre un cuarto y la mitad de la de los blancos europeos y americanos.
En otras palabras, los asiáticos somos un grupo de alto riesgo de padecer diabetes. Si acumulas demasiada grasa visceral en tu cuerpo, expones tu vida a condiciones más peligrosas.