¿Cuáles son las diferencias entre los huesos del pie de los niños y los de los adultos?
I. Diferencias anatómicas
Los huesos de los niños contienen en su mayoría cartílago de crecimiento radiolúcido, por lo que las lesiones múltiples afectarán el grosor de la placa de crecimiento o la distancia entre la placa epifisaria y la placa epifisaria adyacente. Películas simples. Separación ósea. El exoesqueleto es más grueso y los callos aparecen más rápido y con más frecuencia que en los adultos.
En segundo lugar, las diferencias biomecánicas
Los huesos de los niños son más flexibles que los de los adultos y son más resistentes a las deformaciones externas. Un pequeño agujero en el hueso cortical de un niño puede limitar la expansión de una línea de fractura, del mismo modo que se puede perforar una grieta en una pared adyacente a una ventana para evitar la expansión. Los huesos comprimidos de los adultos no pueden soportar la tensión y, a la inversa, los huesos ricos en poros de los niños no se comprimen fácilmente.
En tercer lugar, la placa epifisaria
La placa epifisaria o placa de crecimiento es la capa de cartílago que conecta la epífisis y la metáfisis. Está relacionado con el crecimiento óseo.
Cuarto, diferencias fisiológicas
1. Crecimiento y conformación: el crecimiento proporciona las condiciones para la conformación en gran medida. A medida que los huesos aumentan en longitud y circunferencia, las deformidades causadas por las fracturas pueden corregirse mediante el crecimiento asimétrico de las placas epifisarias y el periostio.
2. Crecimiento excesivo: Las fracturas de huesos largos en niños se acompañan de un aumento del suministro de sangre local, lo que aumenta la nutrición de la placa de crecimiento y estimula el crecimiento óseo longitudinal. En el caso de fracturas de la diáfisis femoral no desplazadas, en 1 o 2 años, el fémur lesionado puede ser aproximadamente 1 cm más largo que el fémur sano.
3. Deformidad progresiva: El daño permanente a la placa de crecimiento provocará un acortamiento óseo o una deformidad angular progresiva.
4. Velocidad de curación: los niños tienen una gran capacidad para curar fracturas y deben recuperarse de las fracturas lo antes posible. No deberíamos pensar en ello por mucho tiempo como lo hacemos con las fracturas en adultos.
Las fracturas de los niños son diferentes de las de los adultos en muchos aspectos. Las placas epifisarias, relativamente frágiles, se lesionan fácilmente. Reconocer la diversidad de lesiones de la placa epifisaria y utilizar métodos de tratamiento modernos son fundamentales para el tratamiento. El crecimiento activo y un buen suministro de sangre garantizan que la mayoría de las fracturas de los niños sanen bien. Sin embargo, las características únicas de los huesos de los niños también pueden provocar algunas deformidades progresivas. Por lo tanto, los niños no son el epítome de los adultos y las fracturas de los niños no pueden tratarse según los puntos de vista o métodos de las fracturas de los adultos, sino que se deben adoptar los métodos correspondientes en función de las características de los huesos de los niños para garantizar un tratamiento razonable.