Calefacción, ¿cómo mantener la salud?
Mantenga la humedad interior: después de la calefacción, la temperatura interior es demasiado alta y el aire está seco. Puede usar un humidificador o colocar un recipiente con agua para aumentar la humedad interior y mantener la respiración suave y la piel húmeda.
Ventilación adecuada: Después de calentar, la habitación se cierra y no circula el aire. Se recomienda abrir las ventanas todos los días para ventilar y mantener fresco el aire interior. Al ventilar, tenga cuidado de no dejar que el viento frío sople directamente sobre su cuerpo para evitar resfriarse.
Dieta: Secar la habitación después de calentarla puede provocar fácilmente escasez de agua. Se recomienda beber más agua, comer más frutas y verduras y reponer agua y vitaminas. Al mismo tiempo, evite comer demasiados alimentos picantes, grasosos e irritantes.
Ejercicio moderado: Después de calentar, la temperatura interior es adecuada y se puede aumentar la cantidad de ejercicio, como caminar, trotar, hacer yoga, etc. , mejora tu condición física y tu inmunidad.
Mantenga una buena rutina: Después de la calefacción, la temperatura interior es agradable, lo que hace que la gente se sienta perezosa. Se recomienda tener un horario regular de trabajo y descanso, acostarse temprano y levantarse temprano para evitar trasnochar y cansarse.
Preste atención a la protección de las vías respiratorias: la habitación se seca después del calentamiento, lo que puede provocar fácilmente molestias respiratorias. Se recomienda utilizar un purificador de aire o humidificador para mejorar la calidad del aire interior, evitar permanecer mucho tiempo en una habitación con aire acondicionado y salir a respirar aire fresco.
En definitiva, durante la temporada de calefacción se debe prestar atención al mantenimiento de la humedad interior, una adecuada ventilación, un acondicionamiento dietético, ejercicio moderado, mantener un buen trabajo y descanso y proteger las vías respiratorias. Con estas medidas podrás mantenerte sano y cómodo.