Red de conocimientos sobre prescripción popular - Colección de remedios caseros - Los terneros criados en cautiverio en zonas rurales a menudo sufren de diarrea. ¿Por qué?

Los terneros criados en cautiverio en zonas rurales a menudo sufren de diarrea. ¿Por qué?

Las altas temperaturas y la alta humedad en verano pueden hacer que los pastos se enmohezcan fácilmente y las vacas pueden sufrir diarrea después de comer pastos mohosos. Además, el ganado tiene alimento más verde y jugoso en verano, y varias bacterias dañinas se reproducen en el ambiente de alta temperatura y humedad, por lo que la diarrea del ganado en verano es mayor que en otras estaciones. Hoy, el editor presenta en detalle las causas y contramedidas de la diarrea. ¡Espero que sea útil para todos! 1. Indigestión y diarrea. 1. Si el ternero ingiere demasiada leche de alta calidad o amamanta artificialmente, no se puede realizar de forma regular, continua y cuantitativa. Además, cuando hay poco movimiento en la pantorrilla, se puede producir distensión abdominal por acumulación de leche. Si no reciben un tratamiento eficaz, se producirá diarrea. Contramedidas: controlar estrictamente la cantidad de leche producida por los terneros, crear condiciones adecuadas y aumentar la cantidad de ejercicio. En caso de indigestión se debe ayunar inmediatamente y tomar lactasa para ayudar a la digestión. Cuando tenga diarrea, no es necesario que la detenga. Deje que salga el contenido y no se deshidratará. 2. Algunos bovinos o adultos pueden sufrir acumulación de alimentos en el rumen, flatulencias ruminales y diarrea si consumen una gran cantidad de alimento concentrado o pasto tierno.

Contramedidas: Controlar estrictamente la ingesta de concentrados y hierbas, fortalecer el estómago a intervalos regulares y mejorar la digestión. Cuando se produce acumulación de alimento ruminal y flatulencia ruminal, primero se debe tomar aceite de parafina para frenar la diarrea y luego tomar algunos medicamentos para fortalecer el estómago y la digestión para acelerar la recuperación. Durante la diarrea, puede alimentarlo con polvo de montmorillonita para detener la diarrea e inyectar gentamicina, cefalosporina y otros medicamentos para prevenir una infección secundaria. En segundo lugar, diarrea inmunda. Si el ganado ingiere alimentos mohosos, contaminados o tóxicos durante mucho tiempo o en grandes cantidades, el tracto gastrointestinal se protegerá y provocará diarrea, lo que se denomina diarrea sucia. En verano, la causa de la diarrea sucia en el ganado es el alimento mohoso, que no ocurre inmediatamente cuando el consumo del ganado es pequeño. Solo ocurre cuando las micotoxinas se acumulan en una cierta cantidad en el cuerpo. Además de la diarrea, suele ir acompañada de síntomas neurológicos como salivación, rechinar de dientes, untar y patear. Contramedidas: en el proceso de cría de ganado, se debe controlar estrictamente la calidad del alimento y se deben prohibir los alimentos con moho, contaminados y tóxicos. Cuando el ganado tiene diarrea sucia, debe dejar de alimentarse, tomar aceite de parafina para tratar el contenido gastrointestinal y luego detener la diarrea y tratar los síntomas. En tercer lugar, diarrea bacteriana y viral.

La diarrea causada por bacterias o virus puede ocurrir directamente o después de una indigestión, diarrea y diarrea inmunda. Cuando el ganado desarrolla diarrea bacteriana o viral, los síntomas suelen ser más graves y la tasa de víctimas es mayor, y algunos de ellos son contagiosos. Se deben tomar medidas integrales de prevención y control para hacer frente a la diarrea bacteriana y viral. Tras la aparición de la enfermedad se pueden realizar tratamientos sintomáticos según la situación concreta, como rehidratación, cardiotónico, antibacteriano, ajuste del equilibrio electrolítico, suplementación con oligoelementos, fortalecimiento del bazo y del estómago, etc. Cuarto, enfermedades crónicas del sistema digestivo. El ganado que ha estado mantenido durante mucho tiempo en entornos deficientes de alimentación y manejo es propenso a sufrir enfermedades gastrointestinales como dolor de estómago y gastroenteritis, que pueden provocar diarrea a largo plazo. Cuando la diarrea ocurre en las tres situaciones anteriores, si el tratamiento no es oportuno o inadecuado, también puede evolucionar a gastroenteritis crónica y diarrea prolongada. Se deben ajustar las contramedidas para este tipo de ganado, como alimentar con forraje de alta calidad y fácil digestión, mejorar el ambiente de alimentación, desparasitar y fortalecer el estómago periódicamente y aumentar el tiempo de ejercicio e iluminación. Después de 1 a 2 meses de cuidadosa alimentación y manejo, la mayoría de estas vacas pueden recuperarse.