¿Pueden los bebés recién nacidos tomar el sol? ¿A qué deben prestar atención los niños cuando toman el sol?
Tomar el sol es de gran ayuda para la salud de los bebés. Puede ayudar a los bebés a producir vitamina D y prevenir y tratar enfermedades relacionadas causadas por la deficiencia de vitamina D en los niños, como el raquitismo infantil. Al mismo tiempo, puede matar las bacterias de la piel del bebé y aumentar la resistencia del bebé al mundo exterior. Por supuesto, si accidentalmente quemas la piel de tu bebé, se recomienda acudir al hospital a tiempo.
Generalmente, los bebés de 3 a 4 semanas pueden salir al aire libre para tomar el sol. El tiempo inicial es relativamente corto, solo para una parte, como los pies y las piernas. Luego, aumente lentamente el tiempo y la duración de los baños de sol. Generalmente, no irradie la cabeza y la cara directamente. Manténgalo en un lugar fresco ni cúbralo con un sombrero. Al tomar el sol, la luz del sol debe estar en contacto directo con la piel. Si te expones al sol a través de un cristal o de la ropa, el efecto de los rayos ultravioleta se reducirá en más de un 30%. Los bebés con raquitismo o que nunca hayan tomado aceite de hígado de bacalao o comprimidos de calcio no son aptos para tomar el sol.
Tomar el sol en ocasiones puede provocar dermatitis solar. Debido a la piel seca, la irritación del polen y otros motivos, los bebés desarrollarán síntomas como eritema, pápulas y descamación local después de tomar el sol. Cuando su bebé esté al sol, puede usar anteojos pequeños para proteger sus ojos, o puede tumbarse al sol y cubrirse la cabeza con una pequeña sombrilla para proteger sus ojos. Lo anterior es la respuesta a si un bebé recién nacido puede tomar el sol y a qué se debe prestar atención cuando un niño toma el sol.