Red de conocimientos sobre prescripción popular - Cuidado de la salud en otoño - Cómo comer frutas durante el embarazo: Los efectos de las cerezas y cómo comerlas

Cómo comer frutas durante el embarazo: Los efectos de las cerezas y cómo comerlas

Las cerezas no solo son deliciosas, sino también ricas en vitaminas y ácidos orgánicos, que pueden promover la absorción de hierro, fortalecer la condición física y prevenir la anemia. También puede embellecer la piel, hacerla rosada y blanca y eliminar arrugas y manchas. Entonces, ¿pueden las mujeres embarazadas comer cerezas?

Las frutas son buenas para la salud.

Durante el parto, las madres necesitan una dieta equilibrada, incluyendo frutas. La fruta es rica en fibra y agua, lo que puede aliviar eficazmente el estreñimiento en el segundo mes.

No es recomendable comer demasiada sandía.

Aunque la generación mayor cree que las frutas son alimentos fríos y que comerlas en exceso es malo para el organismo, este concepto tiene sus ventajas. Pero no todas las frutas se pueden comer. Por ejemplo, la sandía es incómoda de comer debido a su naturaleza fría. Si desea comer frutas en el segundo mes, simplemente remójelas en agua caliente antes de comerlas.

Presta atención a la higiene posparto

Para tener un periodo de parto saludable, las mujeres deben prestar atención a la higiene posparto. Mantenga el perineo limpio y seco, lávelo con agua tibia todos los días y cambie la almohadilla perineal con frecuencia.

Presta atención a tu forma de bañarte.

Puedes bañarte y lavarte el cabello una semana después del parto, pero debes insistir en bañarte en la tina, no en la tina. Puedes bañarte después de las 6 semanas.

Preste atención a la ventilación interior

La habitación debe ventilarse con frecuencia, la temperatura interior debe mantenerse entre 25 y 28 grados Celsius y se deben evitar los ventiladores eléctricos del viento directo.

Asegúrate de que tu ropa esté seca.

Si tu ropa está mojada debido a la transpiración excesiva durante el encierro, asegúrate de cambiarte inmediatamente y ponerte ropa seca; prepara un camisón junto a la cama en invierno y póntelo nada más levantarte a mitad de camino; de la noche para amamantar para evitar resfriarse.