¿Tienes una constitución de piedra? ¿Qué tipo de personas son propensas a las piedras?
La comida de las tres comidas al día tiene su propia acidez y alcalinidad. Por ejemplo, la carne es generalmente ácida y las verduras alcalinas. Si la acidez del cuerpo es demasiado fuerte, es fácil que se produzcan cálculos, especialmente cálculos renales. Por eso, para prevenir los cálculos, equilibra el pH en tu dieta diaria y come más alimentos alcalinos, como tofu, apio, leche, patatas, zanahorias, etc.
Las personas que beben muy poca agua tienen más probabilidades de tener cálculos.
La importancia del agua para el cuerpo humano es evidente. Si bebe muy poca agua, el sistema de circulación urinaria del cuerpo humano se verá afectado. Cuando la micción no puede realizarse con normalidad, las sales inorgánicas de la orina se cristalizan y acumulan gradualmente, formando cálculos comunes en el tracto urinario, lo que aumenta el riesgo de cálculos renales y vesicales. Por eso, para prevenir los cálculos, debes beber suficiente agua todos los días.
La infección por áscaris puede provocar fácilmente cálculos.
Cuando los nematodos regresan al tracto biliar del cuerpo del paciente para poner huevos o morir, varias impurezas se condensarán gradualmente en cálculos biliares alrededor del cadáver del nematodo. Por tanto, para prevenir los cálculos hay que prestar atención a la higiene alimentaria diaria y lavarse las manos antes de las comidas y después de ir al baño. Una vez que se descubre o detecta una infección por ascárides, debe buscar atención médica de inmediato para eliminar las ascárides.
4 Las personas obesas son propensas a tener cálculos.
La investigación científica ha descubierto que cuando el peso corporal supera el peso normal en más de un 15%, la incidencia de cálculos biliares es cinco veces mayor que la de las personas normales. La razón es sencilla. A las personas obesas generalmente les gusta comer alimentos grasosos y ricos en colesterol, lo que tiene un efecto positivo en la aparición de cálculos biliares. Sin embargo, las personas obesas rara vez practican deportes, lo que conduce aún más a la aparición de cálculos biliares. Las personas obesas deben comenzar con una dieta diaria ligera y grasosa, y participar activamente en el ejercicio.
Las personas que no desayunan tienen más probabilidades de tener cálculos.
Los efectos a corto plazo de saltarse el desayuno pueden afectar su estado matutino, mientras que saltarse el desayuno a largo plazo puede provocar la aparición de cálculos biliares. Como el estómago está vacío por la mañana, la secreción de bilis, uno de los jugos digestivos, se reduce, lo que aumenta la concentración de bilis en la vesícula biliar y aumenta considerablemente la incidencia de cálculos biliares.
Las personas que beben agua rica en minerales durante mucho tiempo son propensas a tener cálculos.
El agua mineral puede aportarnos una variedad de minerales beneficiosos, lo que resulta beneficioso para nuestra salud. Sin embargo, si el contenido de minerales en el agua potable es demasiado alto, beberla durante mucho tiempo aumentará en gran medida el exceso de minerales en el cuerpo y aumentará la incidencia de diversas enfermedades de cálculos.
Las personas que suelen comer snacks después de las comidas tienen más probabilidades de desarrollar cálculos.
Todos los días, después de cenar, la familia se sienta en el sofá y come bocadillos mientras mira televisión. Esta es una escena común de la vida familiar en China. Como todo el mundo sabe, esos hábitos alimentarios y posturas al sentarse aumentarán considerablemente la incidencia de cálculos biliares. Primero, el cuerpo se inclina y se sienta en una postura que ejerce presión sobre el abdomen, lo que no favorece la excreción de bilis ni la digestión de los alimentos. En segundo lugar, permanecer sentado durante mucho tiempo después de las comidas provocará una disminución en la absorción de bilis, por lo que el colesterol ingerido no podrá digerirse ni depositarse bien, lo que con el tiempo provocará cálculos. Por tanto, no es aconsejable sentarse inmediatamente después de una comida. Es mejor esperar hasta que los snacks estén casi digeridos antes de comer.