Red de conocimientos sobre prescripción popular - Cuidado de la salud en otoño - ¿Cuál es la diferencia entre un cuerpo propenso a la obesidad y un cuerpo propenso a perder peso?

¿Cuál es la diferencia entre un cuerpo propenso a la obesidad y un cuerpo propenso a perder peso?

¿Cuál es la diferencia entre un cuerpo propenso a la obesidad y un cuerpo propenso a perder peso?

Hoy en día, las personas prestan cada vez más atención a su forma corporal. Independientemente del género, todo el mundo quiere tener una mejor figura. Pero poco a poco descubrirás que los cuerpos de las personas son diferentes.

Algunas personas no engordan si comen demasiado y otras no pierden peso aunque beban agua y no coman. Incluso si dos personas comen lo mismo, una engordará y la otra no. Estos dos tipos de personas son físicos muy típicos que son propensos a la obesidad y aquellos que son propensos a perder peso. Entonces, ¿cuál es la diferencia entre un cuerpo propenso a la obesidad y un cuerpo propenso a perder peso? A continuación, hagamos una breve introducción.

01, existen diferencias en el metabolismo basal. La razón por la que algunas personas aumentan de peso fácilmente mientras que otras no es porque existen diferencias en el metabolismo basal de las dos personas. La intensidad del metabolismo basal varía de persona a persona. Para las personas que pueden desayunar a tiempo todas las mañanas y las personas a las que les gusta beber agua, su capacidad metabólica basal es relativamente fuerte.

Porque una cantidad adecuada de agua acelerará el metabolismo del cuerpo, y desayunar a tiempo todos los días también puede reponer los nutrientes que necesita el cuerpo a tiempo. Si el metabolismo basal del cuerpo es rápido, no habrá exceso de nutrición y será más fácil perder peso.

02, los hábitos alimentarios son diferentes. A las personas que engordan fácilmente y a las que pierden peso fácilmente les gusta comer cosas diferentes. Por supuesto, sus hábitos alimentarios también son diferentes. Uno es comer en exceso y comer sólo lo que te gusta, y el otro es comer con regularidad y de forma más saludable.

Las personas con tendencia a la obesidad no prestan mucha atención al equilibrio nutricional de los alimentos, sino que sólo valoran el sabor, por lo que suelen consumir alimentos ricos en calorías. Con el tiempo, la nutrición del cuerpo se desequilibra, la cantidad de grasa aumenta y no se puede metabolizar rápidamente, lo que lleva a la acumulación de grasa. Por tanto, este tipo de personas tienen menos probabilidades de perder peso que las personas con buenos hábitos alimentarios.

03. Los diferentes estilos de vida son otra razón importante para la producción de dos físicos diferentes. En general, las personas propensas a la obesidad tienen estilos de vida poco saludables, lo que no sólo se refleja en sus hábitos alimentarios sino también en su vida diaria.

Hoy en día, muchos jóvenes están acostumbrados a trasnochar mucho tiempo, lo que también puede provocar trastornos endocrinos. Si no duermes por la noche, no podrás desayunar cuando te despiertes por la mañana. Finalmente, el horario normal de comida se vio interrumpido, formándose un círculo vicioso. ¿Cómo se puede comparar un estilo de vida tan poco saludable con el de personas que normalmente se acuestan temprano, se levantan temprano y comen a tiempo? Por eso, a veces la obesidad puede no deberse a comer demasiado, sino también a hábitos de vida irregulares.

Un físico fácil de perder es envidiable, pero la envidia por sí sola no es suficiente. Si quieres perder peso, tienes que hacer cambios. Desde los hábitos alimentarios hasta el estilo de vida, desde los detalles hasta la situación general, es necesario ajustar todo.

Y si quieres tener una buena figura, no lo conseguirás de la noche a la mañana. Se necesita mucho tiempo para persistir. Si quieres mantener una buena figura, debes ser estricto contigo mismo, de lo contrario puedes rebotar. Lo anterior es sólo la opinión personal del autor. Los comentarios y adiciones son bienvenidos.