¿Podemos seguir comiendo alimentos con moho?
Los alimentos mohosos contienen aflatoxina, que es altamente tóxica y cancerígena. Su toxicidad es 68 veces más tóxica que el arsénico. Puede causar graves daños a los órganos del hígado y contaminar fácilmente los alimentos, poniendo en peligro la salud humana. Cuando los cereales, aceites, maní, frijoles, carne, pescado, etc. Todos tienen moho y producirán una gran cantidad de gérmenes y aflatoxinas. Una vez que se ingieren estas cosas mohosas, pueden aparecer síntomas como diarrea, vómitos, mareos, irritabilidad, enteritis, pérdida de audición, debilidad general, etc. En algunos casos, pueden provocar cáncer, teratología y favorecer el envejecimiento prematuro. Si la cantidad es pequeña, generalmente es inofensivo para el cuerpo humano, pero si la cantidad es grande, puede irritar el tracto gastrointestinal y causar intoxicación alimentaria. En casos graves, puede provocar vómitos con sangre, coma e incluso síntomas de shock.
La aflatoxina en los alimentos mohosos es el principal factor que induce el cáncer y es la única sustancia con claros efectos cancerígenos hasta el momento. Identificada como carcinógena en 1993, la aflatoxina es también un cofactor importante en la infección crónica por el virus de la hepatitis B. Muchas enfermedades y tumores gastrointestinales también están asociados con alimentos contaminados con micotoxinas.
Se debe prestar especial atención al hecho de que los alimentos con alto contenido de almidón tienen más probabilidades de producir aflatoxinas, como el maíz, el maní, el arroz y otros alimentos. Hay que prestar atención al método de almacenamiento. Se recomienda almacenar los alimentos y el aceite de cocina en un lugar oscuro, ventilado y seco. Lo mejor es enjuagar los utensilios de cocina antes de usarlos.
Las investigaciones demuestran que la clorofila puede resistir la toxicidad de las aflatoxinas, por lo que es mejor comer más vegetales verdes.
¿Puedo comerlo si le quito la parte mohosa?
La respuesta es: ¡No! ¡No mohoso, no mohoso!
1. No te comas el resto.
La "parte mohosa" que vemos es en realidad la parte donde las hifas del moho están completamente desarrolladas. Cerca de él ya hay muchos mohos invisibles a simple vista.
2. Las altas temperaturas no pueden matar.
El calentamiento a alta temperatura puede esterilizar y eliminar muchos mohos, pero puede no ser eficaz contra algunos mohos y toxinas. Por ejemplo, las aflatoxinas solo se descompondrán cuando la temperatura sea superior a 280ºC. Incluso si se esteriliza a alta temperatura durante 20 horas, es posible que no se elimine por completo.